Panamá.-
Les platico:
la comunidad de mexicanos en este sorprendente país centroamericano es muy pequeña.
A diferencia de los paisanos que viven en otras naciones de la región, está conformada por lo que el presidente llama “aspiracionistas”.
Es una comunidad muy activa y cada día se parece más a la de los cubanos en el exilio de Florida en eso de apoyar a sus compatriotas que vienen a Panamá en busca de una mejor vida, la que cada vez resulta más difícil en su propio país.
Dista mucho de la migración de México a Estados Unidos. De hecho, Panamá es un país muy pequeño comparado con el nuestro.

En octubre de este 2022 vivían aquí 4;381,583, contra los 130;262,220 de México.
Pero a pesar de su exigua población, Panamá es la economía número 85 del mundo por el volumen de su PIB.
A pesar de los intentos de López Obrador para endilgarnos otros alucinados indicadores para medir -según él y sus también alucinados asesores- el PIB per cápita es el más reconocido parámetro mundial para evaluar el nivel de vida.
Es el indicador que maneja la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, OCDE, cuyo secretario general fue el mexicano Ángel Gurría, de 2006 al 2021.
Aquí, el PIB es de 12,000 dólares anuales per cápita, que lo sitúa en el lugar 63 del ranking mundial.
Realmente la calidad de vida en Panamá no es de las mejores del mundo, pero esto se debe al pequeño tamaño de su economía.
Imaginen esto: Tesla no ha querido instalar una planta en esta nación, mientras que Elon Musk puso hace varios años a México en su radar.

Es que 130 millones como mercado es un mundo contra los apenas 4 millones de acá.
No cito los indicadores al respecto que registra nuestro País según la OCDE porque las comparaciones son odiosas.
Eso se lo dejo a los bobalicones emBOLAdos que se hicieron ricos medrando y construyendo casas para los jerarcas de los aparatos oficiales en los sexenios de Fox y Calderón, y que hoy son acérrimos críticos de esos ex presidentes.
Esos “críticos de pacotilla de chats y chales” rebuznan de incongruencia e ignorancia, pero ya les llegarán a sus casas los “peregrinos” a dejarles sendos citatorios como “regalitos” bajo sus arbolitos de Navidad meridanos y chihuahuenses…
