El teléfono rojo de Rosa Icela

Elena Chávez DETONA: ¿Qué puede hacer Rosa Icela Rodríguez en una secretaría de Gobernación disminuida en sus facultades por el propio López Obrador? La pregunta es fácil de responder:

El teléfono rojo de Rosa Icela

¿Qué puede hacer Rosa Icela Rodríguez en una secretaría de Gobernación disminuida en sus facultades por el propio
López Obrador? La pregunta es fácil de responder:

Ser los oídos y ojos del tabasqueño que sabe de la lealtad a toda prueba de la funcionaria.

Maquiavélico como siempre ha sido, López Obrador jugó muy bien sus cartas en la designación de posiciones que, si fuera un demócrata, le habría dejado a su sucesora Claudia Sheinbaum.

¿Será que teme que la doctora le haga un parricidio como él se lo hizo a Cuauhtémoc Cárdenas?

Eso de que Rosa Icela llegará a la Secretaría de Gobernación a poner paz en el país es la aseveración más burda que he escuchado, mucho más cuando ésta fue la cara de la estrategia de abrazos y no balazos de López Obrador.

Claro, sólo fue la cara, la vocera, la que salía en las mañaneras a afirmar o negar número de homicidios, pues jamás participó operativamente como se espera de un servidor público que tiene a su cargo la seguridad del país.

Rosa Icela fue, el "florero de la seguridad”, el que se acaricia con afecto como lo hizo López Obrador en una mañanera donde le impuso la mano a su subordinada en la cabeza.

La imagen quedó para la historia: una mujer sumisa ante el supremo jefe.

Ahora con el nombramiento de secretaria de Gobernación no hay mucho que analizar. Rosa Icela Rodríguez tiene la encomienda de escuchar y ver todo lo que se hace en la administración de Claudia Sheinbaum para reportárselo al señor que, dice, se ira a la chingada, así se llama su finca ubicada en Palenque Chiapas.

  • ¡Ring! ¡Ring!
  • ¿Cuéntame?, será la voz de López Obrador del otro lado de la línea.
  • “Señor presidente, la vicepresidenta quiere enviar al Congreso reformas que beneficien a los neoliberales”. - ¿Qué
  • hago?
  • “Llámale a Monreal y Adán Augusto para que las paren de inmediato”.

Esa, estimados lectores de DETONA, será la labor de Rosa Icela Rodríguez: controlar a Claudia Sheinbaum a través de los lideres de Morena en el Congreso.

Su lealtad de más de 25 años en que conoció a López Obrador y trabajó para él desde su posición como jefe de Gobierno del entonces Distrito Federal ha sido fundamental para que haya sido la única en mantenerse en todas las administraciones
capitalinas.

Cuando el tabasqueño abandonó su responsabilidad como titular del gobierno de esta ciudad, encargó a Rosa Icela a su sucesor Marcelo Ebrard, luego hizo lo mismo con Miguel Ángel Mancera que le dio la cartera de Desarrollo Social para quitársela un par de años después bajo sospecha de que ésta había operado para perder la delegación Cuauhtémoc, el centro económico de la CDMX.

Mancera, no obstante, y ya con la ruptura con López Obrador no la despidió, la envió en 2015 a la secretaría de Desarrollo
Rural desde donde seguía siendo los oídos y ojos del expresidente.

Cuando Claudia Sheinbaum gana en 2018 la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, la nombra secretaria de Gobierno, quitándole algunas facultades que le pasó a su consentido Omar García Harfuch, me refiero al control de los
centros penitenciarios.

De ahí la saca Andrés Manuel López Obrador a la renuncia de Alfonso Durazo como secretario de Seguridad Ciudadana,
nombrándola a ella, a Rodríguez, como titular, pero solamente, como lo dije al inicio de este artículo, para dar o negar números de muertos y asegurar cada que podía, que la estrategia de su líder de abrazar al crimen organizado
funcionaba de… ¡maravilla!

Veamos si Claudia Sheinbaum cuando asuma como presidenta de México, le devuelve facultades a la Secretaría
de Gobernación, la deja tal cual está y se mantiene como cueva de protección de funcionarios corruptos.

Veamos si la vicepresidenta le quita el teléfono rojo.
Elena Chávez

Periodista egresada de la Escuela Carlos Septién Garcia. Reportera en los periódicos Excelsior, UnomasUno, Ovaciones, en la revista Época. Columnista en el periódico ContraRéplica y en MujeresMas. Reportera interna en el Senado de la República y Secretaria de Gobdrnacion. Funcionaria Pública en el Gobierno del Distrito Federal. Diputada Constituyente de la CDMX. Ha escrito los libros Ángeles Abandonados,.Los 7 Dones de Lucas. Elisa, el diagnóstico final, El Rey del Cash y El Gran Corruptor. Es activista por los derechos de los animales.