Propaganda, petróleo y Lázaro Cárdenas
Para ello, Cárdenas fundó el Departamento Autónomo de Prensa y Publicidad (DAPP) a fin de coordinar la información y propaganda de todas las dependencias del gobierno, dentro y fuera del país.
De acuerdo con el profesor Fernando Mejía Barquera, autor del artículo “El Departamento Autónomo de Prensa y Publicidad (1937-1939)”, Revista Mexicana de Comunicación, Cárdenas expuso en un decreto publicado en diciembre de 1936 los objetivos del DAPP:
Para difundir en el exterior la obra de gobierno, sobre todo en Estados Unidos y en Reino Unido, principales inversionistas en la industria petrolera, el DAPP publicó una revista trimestral en inglés, denominada “Mexican Art & Life”, dirigida por el poeta y diplomático José Juan Tablada.
El ejemplar número 2, abril de 1938, contiene un reportaje que defiende las razones de la expropiación de la industria petrolera:
El órgano oficial justificó la medida expropiatoria, entre otras razones, por la injusta distribución de la riqueza petrolera, que durante años produjo mayores beneficios a los extranjeros que a los propios mexicanos.
Advirtió también que, siendo el petróleo un recurso perecedero, sería un desatino incrementar en el corto plazo la producción del crudo pues la prosperidad duraría mientras existan reservas.
En tono optimista, concluye la revista del gobierno de Cárdenas que los recursos petroleros contribuirán a mejorar las condiciones de vida de los mexicanos y a otorgarles parte del bienestar que les corresponde.
Sin duda, el petróleo contribuyó de manera esencial al desarrollo nacional pero las expectativas de una mejor vida en México, con menor pobreza, no se han cumplido 84 años después.
Fue una oportunidad perdida para varias generaciones de mexicanos marginados que los gobiernos no aprovecharon para crear, no con propaganda sino con resultados, un México próspero, equitativo e incluyente.
Detona aquí el texto publicado en Milenio, con autorización del autor.