Quien mucho amenaza, el temor tiene en casa
A raíz de que asumí la Dirección Operativa del Instituto Ciudadano de Estudios Estratégicos (INCIDE) fundado hace 26 años, preguntaron que cual era la opinión sobre la conducta del presidente López Obrador en relación de a los insultos, mentiras, descalificaciones, injurias y la advertencia de que quienes fueran no era para defender al INE sino a delincuentes como Genaro García Luna.
Esa fue su argumentación y narrativa, además sobre la concentración del 26 de febrero en defensa del INE, en el Zócalo y las principales plazas de 121 ciudades del territorio nacional y 12 más del extranjero.
Nuestro punto de vista se da considerando los aspectos comunitario, psicológico, poder y su operación política.
Comunitario:
Hoy es habitual que gente de diversas edades, grupos sociales y adscripciones ideológicas se manifieste en las calles con distintos tipos de demandas.
Las manifestaciones, las protestas, han sido beneficiadas por la expansión y viralizacion en las redes sociales y la aparición de un espacio público digital nacional e internacional.
Han alcanzado en estos últimos tiempos una gran profundidad y extensión global.
Estos movimientos sociales están inscribiendo y modificando el panorama cotidiano especialmente de las ciudades.
Hoy es posible cuestionar:
- Transformaciones
- Proyectos
- Instituciones
- Autoritarismos
- Gobiernos autoritarios
- Y todo tipo de poderes cualquiera que sea su tiempo y duración, que empujan nuevas prácticas para criticar, proponer soluciones y nuevas formas comunitarias de sociabilización
Los actuales movimientos de protesta se articulan de acuerdo a varios principios:
- Participación directa
- Implicación por afinidad
- Horizontalidad
- Autoorganización
Estos principios les permiten tomar una forma característica, la de una fuerza que busca ocupar y apropiarse del espacio público urbano.
Las acciones públicas han provocado una gran energía contra el orden establecido, sus centros geopolíticos de toma de decisiones, y se acumulan las causas, que tienen sus raíces en la recurrencia y el aumento de las desigualdades sociales, la pobreza, la inseguridad, la informalidad, así como en el deterioro o el estancamiento de las condiciones democráticas.
La calle, la plaza pública, concentraciones y el barrio son los espacios donde se pone a prueba y desafía a diario el orden social y político dominante.
Por esa motivación, si la organización de manifestaciones, plantones, mítines y acciones regulares tiene la función y destino de construir y sustentar una relación de fuerza con el poder, así como la de asegurar la visibilidad pública y mediática de los movimientos, la ocupación de espacios públicos y se persiguen objetivos complementarios, se convierte en un riesgo y un peligro para el gobierno en el poder.
Todas estas acciones vulneran al Poder del Estado.
Por este motivo al Gobierno de AMLO le disgusta e intimida que se ponga límites o se desafíe su poder.
Psicológico:
Dentro del grupo de emociones de carácter negativo, se encuentra el temor.
Esta palabra proviene del latín “timor” y es una pasión del estado del ánimo que lleva a una persona a escapar o alejarse de aquello que puede considerar arriesgado o peligroso para sí mismo.
El temor es una presunción, sospecha o recelo ante un posible daño a futuro.
Forma parte del esquema adaptativo de los seres humanos y de los animales, representa un mecanismo de supervivencia y defensa.
Es una emoción artificial que nos lleva a evitar o a huir de situaciones que pueden no representan una realidad o una situación imaginaria, estas emociones provocan la pérdida del control auto percibido sobre una situación, conducta, o sobre la misma reacción emocional.
Surge en situaciones alarmantes, ambiguas y de incertidumbre y prepara al individuo para actuar.
Es importante señalar que las experiencias desagradables ponen a las personas en alerta, las activa y las hace pensar de manera irracional.
Los gobernantes tienen temor a los gobernados.
Por eso, los gobernantes hacen todo lo posible para que la gente entre al aro, en fin, se someta a los designios y órdenes y caprichos de los gobernantes en el poder.
Las elites no pueden evitar el temor, tienen miedo de perder el control del estado, según la historia, que por siglos han mantenido.
De su temor convertido en miedo salen fantasmas, angustias y emociones que no logran detener.
Inventan enemigos, hacen cálculos sobre conexiones, encuentros y vínculos de otros, para conspirar contra ellos y “fabrican” a sus enemigos, para hacer que la gente les tenga desconfianza y lo que es más grave odio.
En la historia, para mantener el control de la población a través de la desorientación, han asesinado, exterminado pueblos enteros, lideres, intelectuales, sabios y mendigos para mantenerse a salvo y conjurar su miedo.
Se creó la mejor estrategia: la tecnología del terror para manipular a la opinión pública con...
...métodos de educación y propaganda pensada para el odio.
Con esto acción lograron que el horror se volviera razonable, provocaron euforia, detuvieron las emociones frente al dolor y evitaron que se pudieran ver los hechos en su dimensión de tragedia real.
Del miedo creado obtuvieron el control sin límite del estado, del gobierno, las instituciones, el capital, el trabajo y la obediencia ciega a ellas de los ejércitos de la nación.
Infundir el odio, fue la mejor tecnología para imponer “la nueva mentalidad” (se dio el siglo pasado en Alemania) sin lugar a expresiones y respeto a los derechos humanos, a las víctimas y desde luego ni a la democracia.
Bastaba la palabra del líder para que algo existiera.
Poder:
La historia de la humanidad fue, ha sido y será la lucha por el poder.
Hombres y mujeres de todas las sociedades, hasta nuestros días, luchan a lo largo del interminable camino de la historia por la obtención, conservación y acrecentamiento del poder.
Tesis cuarta
En tiempos de incertidumbre la realidad de las poblaciones se ve alterada, a la par, el comportamiento de los ciudadanos de manera individual y social se ve obligado a adaptarse a las “nuevas realidades”.
Durante ese proceso aparecen todo tipo de teorías conspirativas por parte del gobierno en el poder, que ven como enemigos a quien piense diferente y con acciones de propaganda potencian el mar de dudas y hacen navegar a los ciudadanos entre angustias y desconfianzas que llevan a las personas a realizar acciones o tomar decisiones que en condiciones normales serían impensables o incluso paradójicas en contra del poder del gobierno.
Por eso decimos «sin miedo», porque la gente está empezando a perder el miedo, Las personas se dan cuenta de que no están solas y empiezan ya, a desafiar al poder.
Ante la ilegalidad del sistema anteponemos la legitimidad de la calle.
La lucha de los ciudadanos es que respeten sus derechos y se satisfagan las necesidades de la gente.
Las manifestaciones, mítines y marchas públicas empoderan a las personas mostrándoles que hay miles que piensan lo mismo.
Y aunque las personas piensan de manera diferente, ya no pueden sentirse aisladas, marginadas e impotentes, ni que son excluidos sus puntos de vista como disidentes.
Pueden crear un discurso o narrativa y tener un espacio de expresión.
La peor pesadilla de cualquier sociedad es que los ignorantes, los idiotas lleguen al poder.
La operación política del poder:
Los operadores políticos del presidente y él mismo, tienen conocimiento de la importancia y relevancia de la operación política.
Son polifacéticos y tienen además de la administración federal y algunos estados, una enorme red de contactos políticos de todos los partidos, empresarios, activistas y luchadores sociales, influencer, medios de comunicación, senadores y diputados.
Por eso, la célula operacional y Amlo, han reaccionado virulentamente ante el éxito de las concentraciones del 26 de febrero.
La pregunta es: qué vieron en las concentraciones que los desestabilizó.
Lo que quedó demostrado y gravado en la mente de los asistentes a las concentraciones, son las siguientes enseñanzas:
- Vivieron en carne propia que libertad de expresión es expresar en voz alta en el espacio público y gritar muy alto aquello que el gobierno no quiere oír
- No por nada el estribillo gritado más veces y más fuerte fue:
“No somos uno no somos diez, pinche gobierno, cuéntanos bien”.
- Se dieron cuenta de que no están solas, mostrándoles que hay miles de personas que piensan lo mismo, y consiguen empoderar a los hombres y mujeres
- Toman conciencia que, al protestar, modifican la agenda e inician el debate y discusión que hace posible encontrar soluciones a los problemas de la realidad nacional
- Asimila que la protesta en una democracia electoral, facilita y da una voz esencial y amplia para los grupos minoritarios de la oposición: Los visibiliza
- Confronta y examina que, en el gobierno representativo, dar una aprobación sin límites al hecho de que el sufragio universal y el voto mayoritario, sin reconocimiento de las minorías, amenaza hoy con imponer la "tiranía de la mayoría" y anular los derechos y demandas de las minorías
- Las protestas son un correctivo necesario y trascendente para que el gobierno de la mayoría reconozca la existencia y los derechos de la oposición minoritaria.
- Las concentraciones pusieron de manifiesto la necesidad de que comprendan que son las emociones las que constituyen las reacciones de los individuos ante situaciones, y poseen carácter universal y cumplen una función elemental comunicativa, emocional o adaptativa
- Lo anterior indica que una experiencia emocional, da lugar a una reacción corporal, cuya expresión máxima se percibe en el rostro
- Hay condiciones para que pueda aparecer una nueva generación, libre del pensamiento de los errores del pasado, y ver que las opiniones y propuestas de los manifestantes tienen sentido y entonces, se sumen a su causa
Es normal que los gobernados le tengan miedo o temor al que gobierna.
Pero, a veces, ocurre lo contrario: son los gobernantes los que tienen miedo a los gobernados.
Esto es justamente lo que ocurrió; el temor del Presidente y los dirigentes de Morena es que la oposición logró afluencias de ciudadanos sin antecedentes en el pasado reciente.
Advertencias:
¡A veces se gana! Eso debe quedar grabado en la mente y conciencia de los manifestantes que, de momento, puede surgir la sensación de una gran victoria, pero deben tomar conciencia que solo es otro paso para que las demandas y la propuesta pública y la lucha por el poder, continuar para que se tengan mayores posibilidades que se cumplan y se obtengan el triunfo.
En este contexto, el resultado, político, social y las elecciones, sigue siendo incierto y tomará diferentes direcciones de acuerdo con las situaciones sociales, económicas y políticas nacionales. Entre los factores que influirán en el futuro de los movimientos actuales, formularemos los siguientes cuestionamientos:
- ¿Podrán mantener un amplio apoyo entre la opinión pública?
- ¿Ejecutaran acciones para atraer sumar a nuevos sectores, especialmente vinculados a la producción económica?
- ¿Instrumentaran medidas y acciones para incorporar a los empleados del comercio, servicios y la industria, a los obreros, a los técnicos, a los pequeños comerciante e industriales, a los campesinos y ganaderos entre otros?
- ¿Conseguirán en sus movilizaciones incorporar a los jóvenes en sus movilizaciones y acciones a medida que estas se desarrollen?
- ¿Lograrán desarrollar una cohesión reivindicativa, de un programa que abarque los muchos Mexicos?
- ¿Comprenderán que no hay que esperar a hacer el gran cambio para iniciar a cambiar, empecemos aquí y ahora?
- ¿En el proceso organizativo y decisorio, dejaran a un lado los egos, y posiciones de estrellas, para crear una organización que de causa y destino al movimiento por recuperar a México?
- Que más allá de perspectivas de cambio, de ruptura, hay que empezar a construir alternativas que permitan demostrar que hay otras prácticas económicas, sociales y políticas.
- ¿Y cómo se pueden lograr los cambios que reclaman, si no se trabaja en instrumentar una asociación con los partidos que están ahora en la oposición?
Esto es solo el principio y recuerden:
Los gobiernos tendrán miedo, cuando se enfrenten a la desobediencia civil organizada.