México, el deber de actuar de la ciudadanía

Estamos a poco mas de dos meses de las elecciones intermedias más trascendentes que se recuerden en los últimos 50 años de la historia política de México. Ya no hay tiempo para nada, excepto actuar.

No lo quisiéramos reconocer, pero desgraciadamente al parecer en México estamos en un País en decadencia, donde ya no actuamos, solo vemos las cosas pasar.

Algunos contemporáneos míos coincidirán conmigo que en los 60´s y 70´s del siglo pasado, había ciertos valores entre los cuales sobresalían la responsabilidad, la protección de la familia, la valentía, el orgullo, la ambición sana, el honor, la responsabilidad pública y la solidaridad y participación social.

Algunos incluso salimos a la calle cegados de idealismo a protestar por los males del gobierno.

VALORES DESAPARECEN...

...gracias a gobiernos y medios de publicidad destructores de la educación y de esos mismos valores, así como la intromisión de culturas extranjeras muy liberales post guerra, han ido desapareciendo gradualmente en las últimas tres décadas del siglo pasado, y las primeras de este.

Sí, también había defectos como el machismo, la discriminación femenina y discriminación en general, la dictadura de partido y los malos gobernantes, la explotación empresarial, la rendición de los medios de comunicación más importantes al gobierno, etc., los cuales no han desaparecido pese al progreso tecnológico y la apertura comercial y cultural a otros países.

Por el contrario, la mayoría de esos defectos cada vez son más agudos.

Soy amante de la tecnología y admirador de quienes la desarrollaron, pero solo de aquella que ha facilitado la comunicación entre los seres humanos y mejorado sin manipular la salud y propiciada mejoría del nivel de vida.

No lo soy de aquella que ha servido para crecer el desempleo y la riqueza de unos pocos, ni la que se usa para la manipulación de las personas ni la destrucción de seres vivos y la naturaleza; en otras palabras, la que propicia la decadencia de los países.

RAPIDEZ PARA LO BUENO Y LO MALO

Desgraciadamente veo que en general la tecnología no ha mejorado los valores fundamentales de las personas y la sociedad, si acaso mejoró sus habilidades y la rapidez para hacer las mismas cosas, buenas o malas.

En fin, muchos factores han influido para llevar a México en medio siglo, de crisis en crisis y de deuda en deuda y a perder el poder adquisitivo, la unión familiar, la seguridad y otras cosas… y lo peor, la pérdida gradual del orgullo propio, el honor, la solidaridad, y los valores, sobre todo en una buena parte de las últimas dos generaciones.

MÉXICO EN DECADENCIA

Veo con tristeza que estamos en un México decadente y llevado a menos, donde la deshonestidad no solo de los gobiernos anteriores, que ha sido mucha y por muchos años, sino de grandes empresarios nacionales y extranjeros cómplices.

De partidos políticos, de sindicatos, de los medios televisivos y periodísticos más importantes que se han vuelto cómplices de los gobiernos para engañar, desvirtuar la verdad y desviar la atención de la ciudadanía de las atrocidades de esos gobiernos.

De empleados de niveles altos y medios de gobierno, de empresarios que no pagan lo justo ni en sueldos y prestaciones ni en impuestos, de los encargados de la educación y salud públicas.

TRAIDORES

Del desarrollo tecnológico, de la protección de los ciudadanos, donde todos estos traidores a la patria,  pase lo que pase en el país, siempre ganan, porque TODOS se cubren con la misma cobija del saqueo de los impuestos, recursos naturales, y dinero que pertenecen por derecho al País y al pueblo.

Y por si fuera poca la decadencia social, desde los 90´s han proliferado las mafias delincuenciales protegidas por gobiernos locales y federales que le roban a los jóvenes su juventud, su dinero (a veces de sus padres) y su vida, al convertirlos en drogadictos, maleantes, asesinos, prostitutas, etc.

EL PUEBLO SE HA ACOSTUMBRADO A ESTO

Pero por encima de todo, y no libres de pecado, el resto del pueblo se ha acostumbrado a la deshonestidad y la corrupción, participando día a día, fregándose al que se deja, evadiendo impuestos, dando mordidas, o en el menor de los casos acostumbrándose a la corrupción sin protestar.

Evadiendo la realidad, enfrascados en televisión y redes sociales sin contenido educativo, banal y de escasa aportación a la cultura y los valores.

Desgraciadamente, el resultado de esta decadencia también se refleja en que la mayoría de los ciudadanos especialmente muchos de los jóvenes, aún los inconformes con los problemas públicos, no luchan, no protestan, no reclaman.

Y ENCIMA, NO VOTAN

No salen a la calle, no presionan a sus diputados y senadores, dejan que día a día ocurran abusos, no se informan, NO VOTAN, dejan esta responsabilidad a los “adultos” y se encogen de hombros y siguen con su mirada fija en sus móviles y diversión cotidiana, vacíos de información y llenos de placeres fugaces.

Y así, la mayoría de hombres y mujeres ven como se les arrebatan las libertades y el futuro y se esconden cobardemente en sus propias justificaciones, dejando a otros la soluciones.

4T DESTROZA A MÉXICO

Tanta decadencia gradual finalmente llevó a este País a que bandidos peores que antes, en complicidad con el partido en el poder anterior y los medios televisivos tradicionales, manipularan a las mayorías más lastimadas, a cometer un grave error de democracia que ha propiciado que ese puñado de malvivientes, hombres y mujeres auto llamados la “4T”, están destrozando lo que teníamos de este México.

AMLO NO GOBIERNA, DESTRUYE

Así, encima de todo, todos los problemas del País se han multiplicado durante el actual gobierno de Morena y su mesías Andrés Manuel López Obrador, el cual no ha gobernado sino destruido el sistema de gobierno, el equilibrio de los sectores, las clases y las instituciones deliberadamente, siendo además ineficiente, corrupto y evidentemente tendiente a una dictadura socialista, similar a las perversas dictaduras de Latinoamérica que tienen de rodillas a los hermanos latinoamericanos.

Sí, hay muchos mexicanos a quienes nos preocupa profundamente lo anterior, pero pocos se ven en estos tiempos libres de pecado para protestar o reclamar por un cambio de sistema de vida, más justo y más honesto.

De los libres de pecado, pocos dan la cara y el ejemplo, y algunos prefieren actuar en el anonimato por la consabida persecución del gobierno, cuando lo que más hace falta es cumplir su deber de actuar, y poner el ejemplo y animar al pueblo a despertar.

DEJEMOS ATRÁS LA INDOLENCIA

Hoy, es imperativo que olvidemos nuestra indolencia, que pensemos en nuestro futuro, y enfrentemos el hecho de que TODOS TENEMOS EL DEBER DE ACTUAR, DENUNCIAR, PROMOVER EL VOTO Y VOTAR EN CONTRA DE ESTE PÉSIMO GOBIERNO, que es peor de traidor que todos, porque se aprovechó de todo el rencor de la gente a tantos años de abuso y robo indiscriminado, para ser elegido, y ha hecho lo mismo y peor, porque lleva al país a una verdadera dictadura y una catástrofe. NO PODEMOS DEJAR ESTA RESPONSABILIDAD EN MANOS DE OTROS.

Sí, el gran reto es convencer a los millones de escépticos, de que, quitando a este gobierno, podremos enderezar el rumbo del país y de que hay hombres y mujeres que lo pueden hacer sin caer en los vicios actuales y del pasado. DIFÍCIL, MAS NO IMPOSIBLE.

Faltan 78 días para esta histórica elección que puede darnos la oportunidad de dar para atrás a los deterioros que este mal gobierno ha traído a México, y la esperanza de componer los terribles vicios y abusos políticos de gobiernos anteriores, derrotándolos en las elecciones.

Si fracasamos en unirnos y actuar para sacar a este nefasto y traidor gobierno, caeremos para siempre en la catástrofe de una dictadura que destruya el futuro por la que por décadas hemos trabajado muchos mexicanos de todas las clases sociales de este hermoso País.