Saturday Night: La Noche que Cambió la Comedia (Saturday Night/ EUA, 2024)
Saturday Night: La Noche que Cambió la Comedia es un vistazo a los 90 minutos previos a la salida al aire del programa de TV en vivo, tal cual Saturday Night que revolucionó la comedia en su estreno a las 10:30 pm el sábado11 de octubre de 1975.
El evento es visto a través de los ojos del joven productor Lorne Michaels (Gabriel LeBelle) y su visión era llevar al aire en la televisión de antes algo nunca visto, dejar atrás a series como Laugh-In, El Show de Carol Burnett y mas con una visión de jóvenes e irreverentes cómicos.
Y sí, Michaels logró su cometido y su legado existe aún hoy en día con caras que han cambiado muchas veces.
Pero en ese momento el primer programa, llevarla a cabo fue toda una odisea para tantos.
Las caras de esos momentos y muchos convertidos en inmortales fueron Chevy Chase, John Belushi, Dan Aykroyd, Garret Morris, Jane Curtin, Laraine Newman y Gilda Radner.
Yo tuve la suerte de ver el segundo programa y el 1º lo vi en repeticiones o videos o segmentos y nunca se pensó todo lo que son 90 minutos antes de salir al aire.
Nadie salía al aire en directo ya, todo era videotape y el rey de la noche Johnny Carson dominaba la noche hasta en repeticiones en ese horario de los sábados a las 10:30 pm.
Es increíble cómo somos testigos del caos que se convierte en orden y todo se mueve como una máquina bien afinada y precisa que seguirá posteriormente adelante.
Igual vemos momentos icónicos como apreciar al clásico Andy Kaufman realizar su rutina cómica del desesperado fan que quiere cantar el tema de Super Ratón con su personaje “el extranjero” o a Jim Henson tratar de dar vida a lo que sería posteriormente los Muppets, dejar Plaza Sésamo y diversificar su talento y como nota, ambos interpretados por Nicholas Braun al pie de la letra.
Yo no sabía que estaba presente, pero se aprecia a un 20añero Billy Crystal ser desplazado del escenario por la comediante Valri Bromfeld que se hace para atrás y no lo apoya en un momento de qué segmento se queda y qué se corta.
Pero el meollo de esta película es apreciar en medio del caos a los cómicos kamikazes que eran los siete magníficos comediantes que nadie conocía y dejaron sus nombres escritos en los muros de la cadena NBC, cadena que en realidad no los querían pero que a la hora que vieron el dinero, los abrazaron y a la fecha, 50 años después, no los sueltan.
El director Jason Reitman se las arregla inclusive para saltar tiempo y espacio y montar en el momento del estreno rutinas que se llevarían a cabo años después para mostrar lo que hacía cada uno.
No digamos Chevy Chase (Cory Michael Smith) como se estableció como el hombre de las noticias; Aykroyd (Dylan O’Brien) y su personaje de “Fred Garvin, prostituto masculino”, Belushi que odiaba el disfraz de abeja que le hacían poner, Garret Morris el negro del elenco que no sabía cual era su papel entre puros blancos. Jane Curtin una montaña de talento, etc.
El montaje y coreografía del caos es preciso y a tiempo a cada paso y su marcha hacia el clímax depende de la palabra mágica de un ejecutivo de la NBC (Willem DaFoe), “va en vivo”.