“le di un beso a un señor vestido de mujer.
Si tiene pene es hombre
Elena Chávez DETONA: El beso que en días pasados Andrés Manuel López Obrador le dio a Salma Luévano Luna volvió a poner sobre la mesa un tema controvertido, hay quienes dicen, peligroso.
Miércoles, 17 de enero de 2024, 09:25 P. M.
Salma y AMLO. Fotos gobierno de México.
Los hombres que se perciben como mujeres, se maquillan y visten como tal pero, que si de pelear se trata se defienden como lo que son: hombres que nacieron con órganos masculinos.
Esto ha desatado la unión de las mujeres para decir ¡basta!, los derechos terminan donde empiezan los de los demás, en este caso los del género femenino que ya exige límites.
Si tiene pene es hombre y punto.
Foto Staff / Detona.
Respetar los derechos humanos de todos los que habitamos este mundo es la regla general para poder vivir plenamente y en paz, es decir, si las palabras y acciones afectan la vida de otras personas es el momento de identificar los límites.
De entrada, amigas y amigos de Detona, dejo en claro que soy una mujer respetuosa de mis semejantes; la inclinación sexual es responsabilidad personal.
Sin embargo, se debe reconocer que la clase política, como en todo, ha dañado profundamente la convivencia entre las personas heterosexuales y la comunidad LGBT y todas las ramas que de ella derivan porque electoralmente les conviene.
Salma Luévano Luna, quien en su perfil en X se define como la primera mujer trans en acceder a una diputación federal por Morena, sacó a flote lo que realmente piensa el presidente de México cuando al enterarse de que había besado a una mujer trans dijo a nivel nacional...
Después se retractó de sus palabras en otra red, Tik Tok, y la reconoció como mujer.
De no hacerlo, le habrán dicho sus asesores, se metería en un gran problema con la comunidad trans.
Este episodio dio pauta para que una gran cantidad de mujeres se sintieran ofendidas y agredidas por la actitud del mandatario tabasqueño al ofrecerle disculpas a su diputada federal por haberla llamado “señor” y nunca, lo cual es cierto, haber lamentado los cientos de asesinatos de niñas y mujeres en manos de hombres.
México se ha bañado de sangre con los feminicidios y López Obrador ha callado.
De su boca no ha salido ni una palabra de aliento para las familias que han perdido en manos del machismo a sus madres, hermanas, hijas, nietas…
Aproximadamente 10 mujeres y niñas son asesinadas cada día, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
¿Y?
También esto lo ha normalizado el mandatario tabasqueño porque no quiere que nada empañe su pésimo actuar como jefe del Ejecutivo federal.
Ha sido negligente, omiso e insensible ante el dolor de las familias que ha sido víctimas de la desaparición o asesinato de alguna mujer y hasta se ha enfurecido cuando, para exigir justicia, han tomado las calles en todo el país.
Todo, dice siempre, es orquestado por la derecha para perjudicarlo porque según él “vamos muy bien”.
Durante su administración, la violación a los derechos humanos de las mujeres ha aumentado considerablemente, primero, al nombrar a Rosario Piedra como titular de la CNDH, quien ha sido omisa, irresponsable y fría ante los feminicidios y, segundo, porque cuando de manifestaciones de mujeres se trata, amuralla el Palacio Nacional donde se esconde para no enfrentar a las víctimas.
Calderón DETONA aquí.
¡Nos odia!
Sin querer, Salma Luévano puso el dedo en la llaga.
Varios colectivos de mujeres están exigiendo, con toda razón, respeto al género femenino.
No es lo mismo percibirse como mujeres que serlo, dicen.
La diferencia es abismal, el sexo, así lo muestra.
Las mujeres nacen con vagina y los hombres con pene.
Andrés Manuel y Salma. Foto CUARTOSCURO.
Ponerse vestido, maquillarse ojos y labios y colocarse pestañas no las afecta, lo que si las daña, es la violencia que caracteriza a la comunidad trans contra ellas.
Ejemplos: en un debate político o un evento deportivo entre heterosexuales y trans, siempre pierden las mujeres porque la fuerza física jamás podrá ser comparable entre unas y otras.
Entre los comentarios que leí a raíz del “beso al señor que se viste de mujer” me llamó la atención este que les comparto:
La auto percepción no cambia el sexo. La ropa, no cambia el sexo. Las cirugías, no cambian el sexo. El insultar a la gente, no cambia el sexo. Las leyes, no cambian el sexo.
Es pertinente aclarar que las mujeres que han levantado la voz ante la acción presidencial no buscan generar odio entre unas y otras, mucho menos poner en riesgo la vida de las personas trans, simplemente exigen pare la violencia que las segundas han ejercido en diversos ámbitos laborales como la Cámara de Diputados, donde se han visto y han quedado grabadas las embestidas de la diputada morenista María Clemente García Moreno contra sus opositoras.
La ideología de género es un trastorno de la conducta a veces real o a veces engaño, y no sólo se trata de “un señor vestido de mujer".
También es la puerta a la pedofilia y muchísimas más perversiones.
Es criminal, que con tal de tener cautivos electoralmente a estos sectores LGBT y más, la propia candidata morenista, Claudia Sheinbaum, haya enviado, siendo jefa de Gobierno de la CDMX, un decreto al Congreso local que permita a los menores a partir de los 12 años modificar su identidad de género en su acta de nacimiento y con la autorización del padre o madre.
¿Es lo que queremos para nuestra niñez?
Lo cierto, estimados lectores, es que los crímenes de odio contra mujeres trans, las desapariciones o asesinatos de éstas no se dan en manos de mujeres heterosexuales, se dan entre ellas mismas o por los hombres que también matan a niñas, adolescentes, jovencitas….
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