Waldo y Judith van por estancias obligatorias
Esta propuesta tiene el objetivo de que los adultos mayores tengan un espacio para asistir desde la mañana, en donde puedan acceder a terapias ocupacionales y convivan con personas de la misma edad.
Esto tendrá un sinfín de beneficios como por ejemplo la mejora de la salud física y mental. Después, por la tarde, regresarían a casa para disfrutar de la familia.
Estos modelos se pagarían por sí mismos porque las personas que se les complica trabajar por cuidar al adulto mayor, regresarían a la vida productiva.
Según el Censo de Población y Vivienda 2020 del INEGI, en Nuevo León existen 439 mil 617 adultos mayores de 65 años y más, lo que equivale a un 7.6% de los habitantes que necesitan este tipo de atención, que se proveería por el Estado a través de la federación y los municipios.
Según los datos de CVNL, más de la mitad de las mujeres en Nuevo León se dedica al cuidado no remunerado.
Nueve de cada 100 mujeres en el Estado (8.9%) dedican jornadas completas a tareas de cuidados.
Con esta reforma, se prevé modificar los artículos 3, 5 y 10 de la Ley de los Derechos de las Personas Adultas Mayores porque “nuestros adultos mayores se merecen el mejor trato que podamos proporcionarles”, coincidieron Waldo Fernández y Judith Díaz, quienes continúan trabajando para presentar a la ciudadanía sus propuestas rumbo al Senado.