Doctor Todd: prócer humanista
El doctor Todd, con una trayectoria imparable y multifacética, agigantó el espíritu de la Universidad Autónoma de Nuevo León antes, durante y después de su rectoría.
Creó facultades, preparatorias, licenciaturas y maestrías, además, hizo brillar al equipo Tigres con tres campeonatos.
Como especialista en varias ramas de la medicina, la educación y la cultura, escribió 26 libros.
Dominó asignaturas que lo convirtieron en un maestro de vida y líder de opinión.
También fue Embajador de México ante la UNESCO en París, Francia, entre otros cargos de relevancia en el servicio público y académico.
Tuve la fortuna de compartir con él innumerables momentos. Era fascinante.
Tenía dos armas letales: la palabra y el silencio.
Si la situación lo ameritaba, proponía análisis, hacía correlaciones, planteaba escenarios, sugería soluciones.
Si no veía sagacidad en la concurrencia, te ignoraba con elegancia.
Conocí al doctor en 1987. Trabajaba en el periódico El Norte y mi jefe me pidió que apoyara a Todd en un trabajo de investigación educativa; él era Secretario de Educación y Cultura del Gobierno del Estado.
Fue accesible y cordial, aunque su porte era intimidante.
Su trayectoria profesional, voz, estatura intelectual y don de mando no pasaban desapercibidos.
Con el tiempo, nos hicimos amigos, aunque siempre lo traté con respeto y admiración.
Alguna vez le dije, “usted es como el señor Spock, el de orejas puntiagudas de Viaja a las Estrellas, siempre racional e inmutable doctor”, me gusta la analogía, me dijo con una sonrisa.
El doctor Todd fue un señorón que seducía con su inteligencia, un filósofo en busca de la verdad, un pensador que se aventuró al porvenir con templanza, un sofista que supo que “el cambio es el proceso esencial de toda existencia", diría Spock.
Descanse en paz el doctor Luis Eugenio Todd Pérez.
El doctor Todd fue un señorón que seducía con su inteligencia, un filósofo en busca de la verdad, un pensador que se aventuró al porvenir con templanza, un sofista que supo que “el cambio es el proceso esencial de toda existencia", diría Spock.
Descanse en paz el doctor Luis Eugenio Todd Pérez.
NOTA DEL EDITOR:
Plácido Garza, presidente de DETONA, narra la siguiente anécdota de uno de sus encuentros con el Dr. Todd:
Cuando era reportero del periódico El Norte, por ahí del año 1979, llamé a su oficina en la Rectoría de la UANL porque necesitaba confirmar ciertos datos. No estaba, y caí en la trampa de su secretaria cuando me preguntó: "¿Es urgente?"
Le respondí que sí.
En menos de cinco minutos el Dr. Todd se reportó y lo primero que me dijo fue:
"Antes de que me digas para qué quieres hablar conmigo, te voy a decir lo que la palabra ´urgente´ significa en el lenguaje de los médicos: vida o muerte.
Ahora sí dime. ¿Es urgente para lo que quieres hablar conmigo?"
Desde entonces, nunca uso esa palabra para apurar una cita, una llamada o algo... que no es urgente.