Entrega-decepción de poderes en NL
La transición de poderes en Nuevo León demuestra que no habrá una entrega-recepción sino una entrega-decepción.
En efecto, desde la decepción, el gobierno de Jaime Rodríguez Calderón entrega la administración estatal.
El derrumbe del Bronco es real y puede simbolizarse (y los que salgan) al menos en tres rubros:
Inseguridad, corrupción (con su consecuente falta de transparencia y rendición de cuentas) y obra pública (con sus ruinas).
La corrupción tiene como punta de iceberg al Isssteleón por el posible fraude millonario cuando se contrataron dos empresas allegadas a los sobrinos de ex secretario general de Gobierno, Manuel González Flores.
Se trata de sus familiares Manuel y Javier Flores Martínez.
Tiene razón el gobernador electo, Samuel Alejandro García Sepúlveda,al encabronarse:
La fiesta nunca se les acabó a los ladrones.
Y todavía falta ver otras dependencias, como Salud y Educación, donde si le escarban encontrarán más corruptelas.
Otro rubro que simboliza el fracaso del Bronco y sus cercanos, es el que se refiere a la seguridad.
SEGURIDAD: CUENTAS MOCHAS Y HUMILLANTES
El secretario del ramo (al avalarlo en su puesto Samuel Alejandro se convertirá en su cómplice), Aldo Fasci Zuazua entrega cuentas no sólo mochas, humillantes, ya que el combate a la inseguridad se dejó de lado:
Fuerza Civil es una caricatura de lo que fue hace años.
Y Fasci Zuazua todavía se atreve a justificar su mediocre gestión.
Y, graciosito al contemplar o no la posibilidad de un Cártel Nuevo León, dijo:
A los que hay qué calmar es a los delincuentes, no a los ciudadanos.
Otro tema es el de la obra pública y sus ruinas.
El ejemplo mayor, el Metro y sus fallas estructurales.
Como ingeniero, gran connaisseur, el Bronco minimiza las broncas de ese sistema de transporte y la falta de inversión en obra pública: “Claro, tan seguro es el Metro”.
Simbólica y realmente, este gobierno siguió, como el de Rodrigo Medina de a Cruz, arruinando a Nuevo León.
Ahora nos dice la titular de la Contraloría del Bronco, Lourdes Williams Couttolenc, que ya se investiga de oficio la presunta licitación amañada que favoreció a los sobrinos de Manuel González.
Ni como broma, pasa.
¿Cuál es el trabajo de Samuel Alejandro?
Que no convierta la corrupción del Bronco y sus secuaces en impunidad, como lo hizo Jaime con Rodrigo al cobijar sus latrocinios.