La amante inoportuna de Suez, Panamá y el Ever Given

El bloqueo por un barco llamado Ever Given en el canal de Suez, amenaza el comercio internacional. ¿Será casualidad o habrá sido planeado con intención?.

El canal de Suez se comenzó a construir el 25 de septiembre de 1869 para unir El Sinaí con Suez. Este fue el gran éxito de Francia, el poder unir oriente y occidente. Se inauguraría con la ópera Aida de Verdi, pero por problemas técnicos, la ópera fue Rigoletto de Verdi.

Asistió la Emperatriz Eugenia de Montejo en representación de su esposo Napoleón III, y quedó sorprendida al ver la magnitud de esta obra grandiosa y el apoyo al comercio.

A sabiendas de la riqueza que se produciría o lo que esa parte del mundo brillaría, los americanos, en especial Roosvelt, y su camarilla, no lo pudieron asimilar. Quisieron hacer lo mismo en América, y se le llamó al gran creador del canal de Suez, el "Bon Vivant", el diplomático Fernand Lesseps.

Era el tema en todas las noticias del mundo y los ojos voltearon hacia México. Por ejemplo, en Chiapas, había la posibilidad de hacer un canal a través del tratado MC Lane - Ocampo propuesto por Benito Juárez, más las estrellas no estuvieron a su favor.

Luego se pensó en Nicaragua, este proyecto está muy bien documentado. Unos amigos franceses, los Ponçon, viven en Nicaragua y por cierto, tienen uno de los hoteles más bellos en los que me hospedado junto al mar, me enseñaron y explicaron a través de un libro magnífico con los planos dibujados, dato por dato, lagos y lagunas que irán uniéndose a través de la selva.

Era un proyecto fantástico, pero no se logró. El trabajo, tiempo y dinero, serían mejor, pues se conectarían entre el paso más angosto con una serie de lagos que ahorrarían el dragado, sin embargo, el destino hizo de las suyas y “Estados Unidos” escogió Panamá.

Pero ésta no era libre, ahí estaba el mayor problema, y acto seguido, se puso en marcha una guerra civil, por lo que Panamá se independizó y así se formó el pequeño país en donde se haría el canal. ¿En dónde he oído eso?.

Después, surgieron una serie de malas decisiones y desfalcos, robos, enfermedades, acciones apócrifas y la muerte de miles de trabajadores por la fiebre amarilla. 

Tan grande fue la mortandad y las pérdidas, que los embarrilaban en cloroformo y los enviaban a Inglaterra o a diferentes países para venderlos y así, los médicos pudieron experimentar en ellos. 

Al final, Estados Unidos, específicamente, Teddy Roosevelt lo tomó, dejando fuera a Francia, y de esta manera dominó. Sin embargo, Francia logró el canal de Suez por 99 años. Muchos años después, también EUA logró el mismo convenio de los 99 y ya con Torrijos, lo entregó a Panamá. 

Ferdinand De Lessepes, era hijo de un barón y no era constructor, sino financiero, pero era un creador, soñador, y le encantaba el dinero. A donde él fuera, señalan los diarios de la época, era muy querido. Era buen conversador, culto, encantador. Además, se reconocían en él su humanidad y buenas intenciones. Cuando fue cónsul en Alejandría, Egipto, se ganó el cariño del pueblo egipcio al convertir su residencia en un hospital para los enfermos de “la plaga” de 1835.

Al quedarse Estados Unidos con el canal, su fama se esfumó. Años después, Tyrone Power haría la película en la pantalla al estilo Hollywood. Pero esto no había terminado, y los vientos del desierto del Sahara y el siroco, traerían noticias de un drama por suceder.

Siendo presidente de Francia, Françoise Félix Faure, muere repentinamente en brazos de una amiga muy querida, quien se lleva a su casa el libro negro de las aportaciones, acciones y fraudes en la construcción de estos canales. Los que se sabían implicados, estaban aterrorizados, pues esta mujer lo vendería muy bien vendido a los periódicos. 

Se descubrirían juicios y días de asesinatos… de pronto, amanece muerta la madre de Marguerite Steinheil, según ella, por haberse cambiado de recámara y a la mujer hermosa, amante del presidente a quien todos reverenciaban, la llevan a juicio por ese asesinato, sin mencionar aquella valiosa libreta que estaba en su poder, y que al revolver la casa en su búsqueda, había asesinado a la señora, pues juzgan a Marguerite, evitando tocar el tema de la carpeta de anotaciones clandestinas. 

El fiscal del caso, le ofrecía inmunidad si entregaba ese documento, por lo que, la mujer claudica devolviendo el libro de fraudes de banqueros aristócratas y del mismo presidente. Este fue el diario de la corrupción en la que Francia gana el canal del Suez y Estados Unidos, el de Panamá.

Ahora, nos enteramos que un barco descompuesto detiene el flujo de los barcos que manejan y transportan el crudo de Oriente y se dispara el precio del petróleo. 

¿Por qué habrá sucedido? Jamás había pasado, y hoy… ¿quienes serían los implicados para subir el precio del petróleo?.

En el siglo XVIII, fueron los grandes capitales y personas de poder, pero cuando las aguas turquesas del Mediterráneo se unieron al mar Rojo, los dos mares tenían el mismo nivel, el nombre de la amante de Félix Faure, Margueritte Steinheil, salió a relucir con su libro de finanzas ocultas de los famosos canales.

Hoy, en este nuevo amanecer de incertidumbre por la pandemia, ¿lo pasarán por alto, o encontrarán a los culpables? 

Cuando está de por medio el oro negro, ¡nada es casualidad! 
Sonya Garza Rapport

Lic. en Medios Masivos, nacida en Monterrey, N.L. Sub-Secretaria de Cultura del Estado. Escritora de diferentes libros (Eterna Disyuntiva). Doctorado Honoris Causa en Literatura.