Bad Boys: Hasta la Muerte - Bad Boys: Ride or Die / EUA, 2024
La cuarta entrega de Bad Boys con Will Smith y Martin Lawrence sigue siendo la rutina que lograron explotar desde la tercera película del 2020, y es una aventura frenética donde los dos policías se convierten en sospechosos de que ellos y su finado capitán, son policías corruptos empleados de los cárteles de drogas.
La premisa es enteramente sencilla; la realización en manos Adil El Arbi y Bilall Fallah, responsables de la previa Bad Boys: Para Siempre es la que le da la sazón a la trama entera con un recorrido vertiginoso donde solo hay breves pausas para lograr un respiro o dos antes que la película se desboque nuevamente.
El movimiento de personajes y balaceras abunda, y se supone que la parte “seria” es que Marcus (Lawrence) ahora sí padece del corazón, y Mike (Smith) sufre de ataques de pánico... y en el sándwich como aderezo, logran meter en la ecuación al desaparecido jefe de ellos (Joe Pantoliano).
Y lo comenté en la anterior película: todo apuntaba a extraños retornos tipo el universo de Marvel o el de DC, donde el que era antes un superenemigo, ahora se convierte en superaliado.
En fin, somos testigos de como la receta de cocina de Arma Mortal se trata de adecuar al siglo 21, más mal que bien... pero la química de Lawrence y Smith es real y palpable en pantalla.