Cuidado Gatell: ya salió Layda
Una de dos: o nuestros políticos no dicen más estupideces porque no se levantan más temprano o no rebuznan porque simplemente no dan el tono… Y del mal ejemplo que dan a sus seguidores, ni hablar.
En estos tiempos de zozobra, por aquello de tanto muerto por el Covid, yo pensaba que el principal especialista en decir tonterías es el supuesto médico Hugo López-Gatell Ramírez, quien se ha pasado la pandemia defendiendo que el presidente López Obrador no use el cubrebocas y otras trapacerías.
Porque López-Gatell tiene dos años más o menos, que es lo que ha durado la emergencia sanitaria, de demostrar que no ha dado el kilo.
Pero estaba yo equivocado:
Desde su cuenta de Twitter, @goliveros, el periodista Gonzalo Oliveros dio a conocer que resulta que la “Señora Cirugías”, la gobernadora campechana, Layda Sansores Sanromán, quien resultó conductora de un programa de televisión que alude y aplaude las acciones de su administración, reveló que ella no cree en el uso del “tapaboca” ni en la sana distancia.
Pero el mal ejemplo no acabó ahí, Sansores Sanromán invitó a los televidentes a quitarse los cubrebocas, porque, según ella duran poco y contaminan.
“Estaba yo viendo aquí que todavía traen el tapabocas… Pero el tapaboca ya es opcional… Si quieres te lo pones y si no, no le hace… Ya estamos en verde gracias a Dios… Y yo ya te estaría también diciendo que hay que eliminar la sana distancia. Entonces lo voy a consultar para ver si esto es posible claro todavía no hagamos eventos pero oye en la Fórmula Uno no”, dijo la mandataria en su monólogo, en un video que no tiene desperdicio.
Y espetó: “Nosotros hemos declarado COVID free todos los lugares en donde estamos, ya estamos en (semáforo) verde”, además de revelar que a veces usa el cubrebocas “nomás de simulación”, ya que piensa que al usarlo la gente absorbe sus propios microbios.
Claro que no esperamos que cada político mexicano sea un científico riguroso, pero, aplaudir y promover actitudes ignorantes, fue lo que causó que los gringos se levantaran estúpidamente y tomaran su capitolio, nada más por poner un ejemplo.