Deadpool & Wolverine / EUA, 2024

Justo Elorduy DETONA: Director: Shawn Levy. Guion: Ryan Reynolds, Rhett Reese y Paul Wernick. Actores: Ryan Reynolds, Hugh Jackman, Emma Corrin y Matthew Mcfayden. TRES ESTRELLAS y MEDIA

Sobran palabras para decir que se habían tardado y demasiado para montar en la pantalla grande la tercera película del irreverente antihéroe Deadpool a como lo ha encarnado “magistralmente” Ryan Reynold

Pero su regreso ha sido magistral, caótico e irreverente cortesía de la presencia de Wolverine (Hugh Jackman) como su acompañante en esta aventura.

Eso y que a como dice Deadpool en el filme, “ahora sí vamos a ver a los mutantes que Disney compró en la venta de Fox”.

¿Qué se puede esperar en Deadpool y Wolverine?

Para empezar se puede ver de todo como en botica y de sobra como en Costco.

El filme es un merequetengue de ideas locas, superlativamente puestas en pantalla y desde la óptica irreverente de Deadpool, donde de inicio a fin se divierte destruyendo la cuarta pared para hablar libremente con los que somos espectadores apreciando la película.

Libremente y como de costumbre hablando como un dios omnipotente que puede expresar en forma abierta de estudios de cine, todo lo que hay tras bambalina de los actores que participan, jefes de estudios, directores, productores e indirectas dirigidas a otros universos de superhéroes.

Se supone que Deadpool coexiste en el universo de Logan, muerto defendiendo a jóvenes mutantes en Logan (2017) y que esa muerte ocasionará el fin del universo de Deadpool… en unos 2000 años.

El chiste es que hay gato encerrado y Deadpool debe buscar a Wolverine entre miles de posibilidades para que llene ese vacío, si es que lo deja el agente Paradox (Matthew Mcfayden) de la TVA, la agencia temporal que cuida que no haya variantes en la Sagrada Linea del Tiempo (hay que ver Loki para medio entender el tema).

La hermana de Profesor X de los X-Men, Casandra Nova (Emma Corrin) entra en escena como la villana que domina todo en el Vacío donde ella prefiere mandar que servir en el mundo real y donde habrá muchos, muchos cameos como para llenar 20 películas.

Bastantes cameos de actores abrazando sus personajes de antaño y al revés, uno que siempre se le señaló como “él debe ser… es el idóneo… está perfecto” pero nunca, ni personaje ni actor ni película y ahora literalmente hace que muchos se traguen sus palabras.

Así que Deadpool, el autodenominado Jesús el Salvador del Universo de Mavel, a ver como le hace para salvar su universo y muchos otras mas que están en peligro.

En cierto sentido esta película de Deadpool es un justo homenaje al universo de Marvel en sus años cuando estaba disperso comercialmente en muchos estudios de cine, cada uno por sin ningún lado explotando la marca y ya nadie se acuerda de las películas aisladas que triunfaron o se convirtieron en material de culto.

Inclusive tenemos oportunidad de ver un Wolverine muy diferente, un Logan de un universo alterno no tan en línea a los X-Men que conocimos en sus películas y ni se diga, Hugh Jackman igual de bueno en su rol, como de costumbre.

Cortesía de la irreverencia de Deadpool, nos da muchos señalamientos de las fallas de dichos estudios, pasados y actuales y esta crítica donde no deja títere sin cabeza, puede ocurrir porque en el universo de Deadpool todo puede ocurrir y si no ocurre, de todas formas, ocurre.

Como ejemplo, de que ocurre y aunque no, ocurre… el final final al mero último de la película, escena para que Deadpool diga “ya ven, yo no fui, fue el otro”.

Sí, yo creo que el Jesús Salvador de Marvel a lo mejor hace el milagro de enderezar el universo de Marvel, al que le urge una buena enderezada.

Esperemos que la saga de mutantes que ya promete los Estudios Marvel y se entrelazará con el universo que conocemos, rinda frutos.

No, mejor dos o tres películas de Deadpool & Wolverine, hasta que cumplan 90 años de edad… o más, con eso es suficiente.
Justo Elorduy Hevia

Nacido en 1958, año de estreno de El Puente Sobre el Río Kwai. Crítico de cine y por 34 años analista del género en el periódico El Norte. Amante de la magnificencia de la pantalla grande. Y no hay sustituto. Lo que se ve en la pantalla grande, se queda en la pantalla grande.