Es la seguridad, Samuel...
Es cierto, el mundo, México, y Nuevo León, atraviesan por las peores crisis de salud y de economía de los últimos tiempos… Pero llegamos a estos puntos con un problema grave mal atendido, el de la inseguridad, que es el peñasco en el zapato social.
La foto del apretón de manos entre la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero y el gobernador electo de Nuevo León, Samuel Alejandro García Sepúlveda, está llena de hermosas promesas para la entidad.
Y da gusto leer en algunos medios de hoy que García Sepúlveda al parecer pisa tierra y se descarte para buscar la presidencia de la república en el próximo 2024, ya que, según él, “prefiere llegar madurito en el año 2030”.
OJ-ALÁ
En esa misma nota Samuel dice que se va a concentrar en ser el mejor gobernador que ha dado la historia en Nuevo León, y de veras, ojalá y así sea, pero…
De su reciente encuentro con Olga Sánchez Cordero, en la cual califica a la secretaria como “una gran aliada de Nuevo León”, a mi me quedan mis dudas, con todo y que la dama tenga sus casas de descanso aquí cerquita, en General Terán, Nuevo León.
¿Es Sánchez Cordero la encargada de las obras públicas nacionales?, porque Samuel dice que solamente habló de proyectos como el Tren Suburbano, las mejoras al Metro y la Ecovía, así como el canturreado libramiento La Gloria-Colombia, en la autopista a Laredo el cual “robaría para Nuevo León hasta el 20% de los cruces internacionales”.
Ah, ya que también compartió el sueño del proyecto de la carretera Interserrana…
Pero como digo, que bien que se proyecte toda la estrategia para reforzar la economía y hacerle frente a la pandemia, pero Samuel, el problema principal en Nuevo León, hay que reconocerlo, es el de la inseguridad.
Si bien no tenemos índices de delincuencia como otras entidades, hay pedazos grandes del territorio que no son nuestros, y ahí están como muestras las dos carreteras a Laredo.