Una anécdota. Bueno, mejor, dos...
Les platico:
Suelo apagar mi teléfono celular al momento en que me voy a dormir.
Lo enciendo de madrugada, cuando el deber es más fuerte que los afanes de dormir.
A esas horas en que medio mundo duerme, el silencio de la noche ayuda a la concentración, la cual eventualmente se rompe -en mi caso- por los imprudentes afanes de notoriedad de gente como Martha Lozano, un tal Carlos LIF, otro barbaján de los chats que solo se pone "Polo", otro que tiene un puesto de elotes en Escobedo y que usa el alias de emperador romano, y cada vez más seguido, por los que se dedican a amenazar, escudados en el anonimato del whatsapp.
Al respecto, no entiendo cómo permitenesas babosadas, los "administradores" de ciertos chats que, después de abrirlos muy pomposamente, los dejan al garete y a su suerte.
Primera anécdota:
Alguien me llamó a las 3:30 de la madrugada en uno de estos días.
No fue mensaje, sino llamada fuera de whatsapp y después de asegurarse de que era yo, se arrancó en primera con una retahíla de insultos de todos los calibres, colores y sabores.
Remató su perorata así: "Aunque vivas en San Pedro, cuídate, cabrón, porque te vamos a partir tu madre", así tal cual me dijo.
Eso fue lo que lo hizo diferente a otras llamadas de ese tipo que recibo cada vez más frecuentemente.
Ja, como si vivir en San Pedro fuera garantía de seguridad. No se lo dije al hampón que me llamó, pero después de que Miguel Treviño de Hoyos dejó su tiradero de seis años, el otrora municipio modelo de América quedó para el arrastre. A ver cómo le va a Mauricio Fernández, pero la tiene difícil el nuevo alcalde.
En fin, haciendo uso de la calma y paciencia que solo se me dan de madrugada, le respondí calmadamente:
- "¿Me quieren fregar?"
- "Claro, idiota ¿no estás oyendo"?
Entonces me tranquilicé, porque entre las muchas cosas que aprendí de mi abuela la alcaldesa, fue que el perro que quiere morder, nunca anuncia la mordida.
Luego, llevado por esa tranquilidad que solo me visita de madrugada y pensando en mi abuela, le respondí:
- "Bueno, me doy por enterado. Solo te pido un favor: fórmense en la fila y tomen su número, porque adelante de ustedes, hay muchos".
Silencio del otro lado y después de una tibia mentada de madre, colgó.
Segunda anécdota:
Ayer casi al mediodía me escribió un amigo a quien le digo Coach.
Me dijo:
- "Tu abuela me cae a toda madre, como dice Catón".
Es que muy seguido la menciono en mis columnas, porque fue de las personas que más han influido en mi vida.
Además de mis padres, hubo alguien que igual marcó mi vida: Mi bisabuelo, de quien es la primera vez que les platico.
Así, después de agradecerle al Coach haberme recordado a Doña Lupe, recordé que las últimas palabras de mi bisabuelo me las dijo a mí.
Cuando ya estaba en las últimas, recostado en su cama, pues me pidió que medio lo levantara, preguntó:
- "¿Cumplí?"
No le respondí. Solo puse mi cabeza en su pecho.
Y en ese momento, sentí en mi corazón el último latido del suyo.
Murió con una sonrisa en su rostro casi centenario.
De él aprendí el gusto por el béisbol. Lo escuchábamos juntos en un radio con chasis de madera a cuya bocina pegaba sus orejas, porque estaba medio sordo.
- Si de mi abuela aprendí a leer y escribir a mis 3 años y medio, con Don Amado Castillo Vidaurri desarrollé el gusto por el béisbol a los 8.
- Si a los 7 años aprendí inglés en la "Academia Blanco", fue por mi abuela, y con mi bisabuelo le entendí al béisbol narrado en inglés, porque sintonizaba en su radio puras estaciones de Estados Unidos.
Como tenía mareada a mi abuela con que quería aprender inglés, un día -sin avisarme- me dejó en encomienda en la tienda de telas del señor Blanco, en Laredo, Texas, con la condición de que no me hablaran ni una sola palabra en español durante los tres meses que estuve ahí, como ayudante.
Por eso cuando me preguntan, siempre digo que aprendí inglés en la "Academia Blanco".
Al dueño de la tienda también le gustaba el béisbol y escuchaba con él los juegos de las Ligas Mayores, obvio, narrados en inglés.
Gracias, Coach, por los recuerdos.
Cajón de Sartre:
- Citando de nuevo a mi querido y admirado Catón, discúlpenme si hoy no les escribí de políticas y cosas peores.
- Les deseo que tengan un plácido domingo, y mañana, cambio completo de programa, sin faltar el Incomparable Iván y toda la Compañía.
Estoy viendo la Serie Mundial.
Lo que van a ver en seguida, sucedió en el primer partido, que ganaron los Dodgers de LA a los Yankees de NY, 6-2 en extrainnings:
Un aficionado atrapó el batazo de un jugador de los Yankees metiendo su guante dentro del terreno de juego.
El segundo de ayer viernes 26 también fue ganado por los Dodgers. El lunes 28 se reanuda la Serie en Nueva York. Ahí están programados tres más, pero si los angelinos ganan dos, adiós Nicanor, serán campeones.
Lo dudo, pero con uno que ganen en la casa de los bombarderos del Bronx, la Serie volverá a Los Angeles.
El autor en otros medios nacionales y extranjeros:
https://www.sdpnoticias.com/autor/placido-garza/
https://muckrack.com/placido-garza
https://qoshe.com/yazar/pl-cido-garza/2695060
https://vanguardia.com.mx/autor/-/meta/placido-garza-irreverente