Becado

Francisco Sepúlveda Cañamar DETONA: Sé que para muchos, la principal reforma es la reforma judicial; para otros, es la reforma a pensiones.

Para mí, es la propuesta de becas para estudiantes desde jardín de niños hasta nivel de educación superior.

Lo sé, porque en su momento, yo pude estudiar debido a estar becado.

Siendo huérfano de padre
  • Con una madre que recibía una modesta pensión.
  • El hecho de poder estar becado permitió que no abandonará mis estudios.

Y es que, el principal motivo por el cual los jóvenes abandonan sus estudios en México, es por falta de dinero.

En un 80% hasta 90% de los casos, ese es el motivo.

Así que, desde que murió mi padre, la secundaria, la preparatoria y la escuela de medicina, las pude completar gracias a becas.

Y, el estar becado, me obligó siempre a estar en los primeros lugares.

Fue una condición "sine qua non".

Por eso, sobre todo en los 90 y los 2000, cuando vi que las becas que yo pude disfrutar en su momento desaparecían, y la educación, como otros derechos, se volvía una "mercancía", pues; sabía que México se encaminaba a una catástrofe social de proporciones apocalípticas.

Lo anterior, porque vi de primera mano como los exámenes de admisión y el cierre de matrículas (sobre todo en estudios superiores), provocaban que muchos jóvenes, muchos, muchos jóvenes, quedarán "relegados" de la sociedad.

Y esos jóvenes, también aspiraban a poder obtener conceptos tan básicos como tener dinero para poder comer.

Y el hambre es mala consejera.

Así que muchos de esos jóvenes "relegados", que fueron catalogados de "NiNis", por lo de "Ni estudian ni trabajan"

Pues terminaron siendo "contratados" por la única actividad donde no te exigían grados académicos para poder tener un trabajo bien pagado: el crimen organizado.

Por lo tanto, estábamos en un círculo vicioso muy peligroso: cerrando escuelas y oportunidades de estudio, lo cual daba masas de jóvenes sin oportunidad de estudiar.

Lo anterior obligaba a dichos jóvenes a formar parte del crimen organizado, con lo cual aumentaba la violencia.

Violencia que obligaba a desviar recursos a la seguridad.

Recursos que provenían de otras áreas, como la educación.

Y volvemos a empezar, porque sin recursos, se cerraban escuelas y oportunidades de estudio...

En su momento, hasta yo tuve oportunidad de realizar actividades delictivas.

Porque veía a mis camaradas que habían decido dejar de estudiar, y que habían elegido el camino del "dinero fácil"; y hasta burlas tuve que soportar debido a mi eterna pobreza, mientras ellos vestían a la última moda, y tenían autos de lujo.

Obvio, ellos terminaron muy mal:
  • Encarcelados
  • Desaparecidos
  • Desterrados para siempre de Monterrey.

Y yo tardé años, décadas, en tener un buen nivel de vida.

  • Pero lo obtuve a base de trabajo, de tesón.
  • Pero, sobre todo, lo hice en forma legítima.
  • Por lo cual, nunca tuve que estar a "salto de mata".

Y sé, que a diferencia de muchos de mis camaradas de la juventud que, aún teniendo la oportunidad de hacer las cosas en forma correcta, decidieron irse por el "caminofácil"; muchos jóvenes ya ni siquiera pudieron elegir a partir de los 90, sobre todo, al final de dicha década.

Así que, para mi impresión, veo excelente que mis impuestos sean aplicados para educar a los jóvenes.

Porque esa, es la mejor inversión que un gobierno, cualquier gobierno, puede hacer con el mejor recurso del cual goza un país: su recurso humano.

Porque puede ser que no tengas recursos naturales, como Corea del Sur, no se diga Japón, Taiwán o Singapur.

Pero, al decidir invertir en educación, te vas a transformar, más temprano que tarde, en una potencia económica.

Porque la mejor inversión, de una persona o de una nación, siempre será la educación. 

 

Siempre.
Francisco Jesús Sepúlveda Cañamar

Médico oftalmólogo. Nacido y criado en Monterrey, N.L (1967). Maestro en ciencias por la UJED. Premio a la productividad científica del IMSS en 2013. Miembro de la Sociedad Mexicana de Oftalmología, y de la Real Sociedad de Medicina de Inglaterra. Miembro fundador de MORENA. Activista político y médico (Movimiento Médico 22 de junio).