Perdón, pero no entiendo
No es algo optativo, al gusto y conveniencia. Se cumple.
Esa es una parte esencial de lo que entiendo por Estado de derecho.
Me asombra, por tanto, que los comités de evaluación de los poderes Ejecutivo y Legislativo creados para el proceso de selección de candidatos de la elección judicial desacrediten e incumplan, porque sí, la orden de un juez de distrito para suspender, vía un amparo, el proceso; que la desconozcan porque dicen que es improcedente y ya.
Perdón, pero no entiendo.
Aun si tuvieran razón en el fondo, deberían suspender el proceso como se les ha ordenado y obtener una resolución que les permita seguir adelante.
Lo contrario es decir: acataremos lo que nos parezca y lo que no, no.
Lo contrario es decir que, como ellos interpretan de cierta forma una acción declarativa del Tribunal Electoral federal, no harán caso a la suspensión dictada por el juez.
Lo contrario es imponer una superioridad de facto.