Salud

Seis hábitos para combatir la mala memoria

Conforme pasan los años, la memoria se va deteriorando, pero podemos alentar el proceso con estos puntos importantes que te compartimos a continuación.
¡Buenas noticias!

Es posible bajarle el ritmo al deterioro de la memoria, ya que un estudio sobre envejecimiento arrojó que hay seis hábitos saludables que podemos adoptar en nuestro estilo de vida para frenar lo antes mencionado.

En China, a lo largo de 10 años, se ha llevado a cabo un estudio en adultos mayores de 60 años en donde se comprueba cómo a partir de su buen estilo de vida y dieta nutritiva, se refleja en el deterioro de su memoria, ya que cuenta con un proceso más lento.

Dadas las muchas causas posibles del deterioro de la memoria, podría ser necesaria una combinación de hábitos saludables para obtener el mejor efecto
Estos son los seis hábitos que pueden alentar el proceso del deterioro de memoria:
  1. Dieta con alimentos nutritivos como frutas, verduras y granos
  2. Ejercicio regular
  3. Contacto social activo
  4. Actividad cognitiva (por ejemplo: leer y escribir)
  5. No fumar 
  6. No beber alcohol

Tratemos de adoptar los más posibles para lograr una mejor calidad de vida.

Comparte esta nota a tus seres queridos.

Después de tener en cuenta otros factores de salud, económicos y sociales, los investigadores encontraron que cada hábito saludable se asoció con una disminución de la memoria más lenta que el promedio durante 10 años. “Una dieta saludable tuvo el efecto más fuerte en la desaceleración del deterioro de la memoria, seguida de la actividad cognitiva y luego del ejercicio físico”, indicó el profesor Jianping Jia.

“En comparación con el grupo que tenía estilos de vida desfavorables, la disminución de la memoria en el grupo de estilo de vida favorable fue 0,28 puntos más lenta durante 10 años, y la disminución de la memoria en el grupo de estilo de vida promedio fue 0,16 puntos más lenta. Los participantes con el gen APOE con estilos de vida favorables y promedio también experimentaron una tasa más lenta de deterioro de la memoria”.

Los investigadores han indicado que sus resultados proporcionan «pruebas sólidas» de que seguir un estilo de vida saludable se asocia con una tasa más lenta de deterioro de la memoria, incluso para las personas que son genéticamente susceptibles a ello.