Avances fiscales
Es difícil que una persona o empresa se entusiasme al desprenderse de recursos financieros para favorecer la convivencia, ajustando sus márgenes de ganancia y los beneficios que ello pueda generar.
Por años, nuestro país no ha emprendido una reforma fiscal profunda que permita ampliar la base contribuyente y por el otro.
Emprender acciones firmes y decididas para que empresas mayores contribuyan y cumplan con sus obligaciones fiscales.
El caso de Grupo Salinas es notable, por el escándalo mediático y por el propio peso que le ha dado el dueño de dicho grupo, Ricardo Salinas, el tío Richi.
No obstante, y considerando que esta gran reforma fiscal aún se encuentra pendiente, el actual gobierno si ha procurado que los grandes contribuyentes paguen los impuestos que le corresponden, que contribuyan al bienestar común.
Al final de cuentas el financiamiento de servicios públicos como seguridad, alumbrado, agua, drenaje, educación y salud, fundamentalmente deben ser provistos por los gobiernos, para lo cual es necesaria la contribución de todos.
En este sentido, las actividades desplegadas por el Plan Maestro del SAT lograron recaudar 2.3 billones, dicho monto comprende 51% de los ingresos totales, los cuales sirven para dar soporte financiero al gasto gubernamental.
Como parte del plan, el SAT implementó la atención al contribuyente, la fiscalización, la publicación de tasas efectivas y se revisaron los sectores que no eran auditados, lo que ha logrado sostener el buen desempeño en la recaudación de los ingresos tributarios durante el sexenio.
Acciones de las cuales se obtuvieron 248 mil 651 millones únicamente de actos de fiscalización y se logró la regularización total o parcial de 918 grandes contribuyentes.
De conformidad con los boletines de prensa del SAT:
“La eficiencia de la fiscalización de grandes contribuyentes aumentó de forma importante, ya que, en los cinco años de esta administración, la recaudación por auditorías a este tipo de contribuyentes superó en 502 mil 216 millones, lo que implica un crecimiento real de 57%.”
Alcanzar modelos de contribución más justos y progresivos permiten una mayor distribución de recursos y favorecer el desarrollo económico nacional.
En este sentido, debería aprovecharse este impulso para lograr ampliar la base tributaria, impulsar la creación de empleos y fiscalizar de mejor manera tanto a los contribuyentes, independientemente de su tamaño, como al uso de estos recursos.
El SAT presume que la cifra histórica de recaudación obtenida se alcanzó sin el incremento o creación de nuevos impuestos, gracias a acciones enfocadas al combate a la corrupción y la impunidad, al eliminar la condonación de impuestos de los grandes contribuyentes, para lograr un piso parejo.