Ciclovía de $31.5 millones para corredores, carreoleros y pasea perros
Les platico:
Lo primero que se me vino a la cabeza al ver lo que aquí van ustedes a ver, fue: ¡Ah! qué pinche ciclovía tan cara... para corredores, carreoleros y pasea perros...
Los corredores de calle (tengo 52 marathones en mis alforjas) sabemos que SIEMPRE hay que mirar de frente a los carros.
Cuando vean a alguno dándoles la espalda, respetuosamente bajen el vidrio de la ventanilla de sus autos y miéntenles la madre, porque se están jugando la vida y arriesgando la de otros.
Ahora sí, los $33.5 millones que Miguel Treviño les dio a ganar a dos de sus constructores favoritos con esta -1a de 3- ciclovías, la de Alfonso Reyes, es la inversión más cara de la historia para darle protección a los corredores y también a los pasea-perros y también a quienes pasean a sus bebés en las carreolas.
Es más, sé de un vivo que vive en la Colonia Palo Blanco que comenzó a anunciarse así:
"Paseo perros por la ciclovía"
Cabrón visionario oportunista.
Hay qué enviarle su CV a Jeff Bezospara que le maneje unomás de sus negocitos.
El asunto es que en la ciclo vía de Bernardo Reyes, los ciclistas de trabajo siguen brillando por su ausencia. Esto le sigue dando en la madre al argumento híperlactante de Miguel Treviño de que todo sea por la movilidad planetaria sin usar combustibles fósiles.
Se necesita estar bien p3nd3jo para no saber -siendo ciclista como el alcalde Miguel se autonombra- que los "pedales" salen a "rodar" siempre en macolla.
Mínimo cinco y máximo los que aguante el carril de la calle.
¿Y EL SEMÁFORO, APÁ?
Hoy que salí a "rodar" atestigüé incluso que dos ciclistas chipocludos traían detrás de ellos a su escolta A PESAR DE IR POR LA CICLOVÍA. ¿Pos no que muy segura, Miguel?
Estos "pedales" no metieron a a la ciclovía a la Jeep de sus garuras nomás porque no cabía pero ya mero lo hacen.
Y pa´que vean que los policías y tránsitos de San Pedro y la "carabina de Ambrosio" son dos carabinas, en el cruce de Alfonso Reyes con Cuauhtémoc y la avenida Las Olimpiadas, los dos ciclistas se brincaron olímpicamente el rojo del semáforo.
Anoté las placas, por si alguien del C4 me quiere contactar, aunque esta infracción la cometieron en las meras narizotas de las camarotas que están encima del semáforo.
Total, un "independiente" -tirándole a MC- desmadre.
CAJÓN DE SASTRE
"Qué soberano desmadre y mientras tanto Miguel, baboseando con su LEGO", dice la irreverente de mi Gaby.