Lo que no suena lógico, suena metálico

Es totalmente injustificable que López Obrador defienda a Pedro Castillo, el derrocado presidente peruano que enfrenta cárcel por robar y cometer otros graves delitos durante su brevísimo mandato. Bueno, sí hay una justificación para que AMLO esté aliado con el lumpen, con lo más podrido de la política latinoamericana: Cuba, Nicaragua, Perú, Venezuela, Argentina, Chile y Bolivia durante el mandato de Evo Morales: El dinero mal habido que caracteriza a quienes en mala hora son presidentes de esos países, con excepción -hasta ahora- del joven chileno. Este fue uno de los temas que traté hoy con Plácido Garza en DETONA, uno de los medios que le ponen pecho a las balas buscando despertar la conciencia de los mexicanos que siguen aletargados, sin tomar acción, a pesar de que cada día este gobierno arrastra a México hacia el precipicio.