Trump no nos va a salvar

Beatriz Pagés DETONA: Mientras tenemos la mirada puesta en el norte, atentos a lo que dice y no dice Trump, aquí abajo, en las cañerías de la 4T sigue la destrucción de las instituciones y de la democracia.
La mayoría de Morena en el Congreso sigue aprobando al vapor reformas inconstitucionales.

Lo mismo para asaltar los ahorros de los trabajadores en el INFONAVIT que para aprobar las leyes secundarias de una reforma energética que convierte a PEMEX y a la CFE en monopolio y botín exclusivo del gobierno.

Es cierto que la amenazante agenda de Trump le tiró el tablero a la 4T, pero eso no quiere decir que el magnate tenga interés en frenar la agenda legislativa que heredó Sheinbaum para consolidar el obradorato.

Mientras el gobierno mexicano le dé al magnate lo que pida- y la 4T le va a entregar hasta las mismos calzones- lo demás no le importa.

Trump agita el garrote para obtener de México ventajas comerciales, no para defender la Constitución o las libertades de los mexicanos.

Arturo Sarukhán, ex embajador de México en Washington, reprodujo en un artículo la opinión que tiene el mandatario norteamericano del país y que retrata sus futuros intereses:

“Ustedes los mexicanos son muy fregones porque embaucaron a Estados Unidos y negociaron a su favor el TLCAN”.

Es necesario, por tanto, no engañarnos.

Ante la impotencia y la desesperación de ver cómo le crecen los brazos y los pies al autoritarismo hay quienes piensan que Trump llegó para salvarnos.

Trump no nos va a salvar.

Nadie va a hacer por los mexicanos lo que los mexicanos no hagamos por nosotros mismos.

Desde que llegó Claudia Sheinbaum al poder –hace más de 100 días–, y desde que regresó Trump a la Casa Blanca –hace diez– la oposición no ha dado señales de vida.  

Las organizaciones ciudadanas y la sociedad en general han caído en un alarmante desánimo que necesita ser urgentemente revertido.

La parálisis de los partidos y la docilidad de importantes medios de comunicación ante el poder mantienen a la población –para alegría de la 4T– anestesiada.

Nadie está capitalizando los errores, abusos y arbitrariedades del régimen.

No hay quien reaccione ante el cinismo, la mentira y la demagogia de la “mañanera del pueblo”.

No hay quien le diga a Sheinbaum: eso de que “el pueblo pone y el pueblo quita” es mera demagogia para evitar reconocer que el narco gobernador de Morena Rubén Rocha, es insostenible.

No hay quien exija a la Presidenta destituir a Rocha y a otros mandatarios morenistas vinculados a la delincuencia para demostrar –frente a las amenazas arancelarias de Trump– que no protege a los cárteles y que está decidida a desmantelar la red delincuencial que le heredó su jefe político.

Tampoco hay quien se indigne ante el vergonzoso espectáculo circense de la tómbola colocada en el Senado para elegir a candidatos “cómodos” que ayuden a sostener la dictadura judicial.

Mientras la oposición calla y la ciudadanía duerme, el carro del obradorato sigue avanzando, listo para aprobar una reforma electoral que le permita mantenerse en el poder para siempre.

Trump va a doblar a la 4T.

Tiene con qué. Le sacará lo que quiere.

Pondrá sobre la mesa un misil que diga “Hombre de Palenque” para que Sheinbaum entregue lo que tenga que entregar.

Pero, Trump no moverá un dedo para salvar nuestra democracia.
Beatriz Pagés Rebollar

Directora general de la Revista “Siempre”, una de las más influyentes de México, fundada en 1953 por su padre, Don José Pagés Llergo. Ha formado parte de los equipos de Televisa, Canal 11, Multivisión, CNI, Canal 40 y es comentarista política de numerosos medios. En 2019 renunció al PRI, donde militó gran parte de su vida.