Y sigue la mata dando...
Mohsen Rezai, vicepresidente de asuntos económicos en Irán, fue uno de los invitados de honor en la toma de posesión, bueno en la usurpación, diría yo, de la presidencia de Nicaragua.
El iraní es requerido por la justicia Argentina desde hace varios años por ser uno de los autores intelectuales del atentado terrorista contra la AMIA (Asociación Mutual Israelita Argentina) el 18 de julio de 1994, causó 85 muertes y más de 300 heridos.
El embajador de Argentina en Nicaragua ha jurado por todos los santos que él no lo vio, no lo saludó, ni sabía que iba a estar ahí.
Evidentemente, la cancillería de Argentina emitió un comunicado condenando la presencia de este personaje.
Los argentinos sienten, después de este incidente, que su diplomacia está pasando por uno de los peores momentos de su historia y tienen razón, aunque es la diplomacia de muchos países de Latinoamérica la que está pasando por momentos realmente bochornosos, incluyendo la mexicana con las dos propuestas disparatadas para embajador en Panamá; voy a dejar que una cortina de silencio caiga sobre este vergonzoso tema.
Para cerrar el tema de los flamantes invitados de honor a tan...sublime evento, vale la pena mencionar a Juan Orlando Hernández, acusado de narcotráfico; Nicolás Maduro, investigado por crímenes de lesa humanidad; Mauricio Funes, requerido por la justicia Salvadoreña acusado de malversación de fondos... en fin, la imposición como presidente del comandante contó con la presencia de la "creme de la creme" de la corrupción, autoritarismo y terrorismo.
A la Libertad por la Universidad
Es el lema de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua. Surgió cuando las universidades pelearon por la autonomía universitaria en tiempos de Somoza...
Lamentablemente la autonomía universitaria se perdió en Nicaragua.
Ayer, la Asamblea Nacional le canceló la personería jurídica a cinco universidades privadas del país:
- Universidad Católica Agropecuaria del Trópico Seco (UCATSE)
- Universidad Popular de Nicaragua (UPONIC)
- Universidad Nicaragüense de Estudios Humanisticos (UNEH)
- Universidad Paulo Freire
- Universidad Politécnica de Nicaragua (UPOLI)
La excusa es que no presentaron sus estados financieros en tiempo y forma, aunque realmente les entorpecen la entrega de documentación.
Recuerdo muy bien a una maestra de secundaria que nos decía que cuando los gobiernos atacaban a las universidades, lo hacían porque son los centros donde se desarrolla el pensamiento.
Los gobiernos autoritarios no quieren que critiquemos solo quieren una manada de borregos sin voluntad.
Hace unos quince días amanecimos con la noticia de que los estudiantes que aspiren a una beca universitaria tienen que escribir una carta para el comandante, supongo que gana el que mejor cepille los zapatos de nuestro augusto presidente.
Debo añadir que el hostigamiento a las universidades refleja el deterioro de las democracias y es una muy, pero muy mala señal.
Juicios a Presos Políticos
Hace días se reanudaron los juicios a los presos políticos.
Yader Parajón fue condenado por conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional.
Lo secuestraron el 16 de abril de 2019 sin orden de aprehensión y sin garantías de justicia.
Su juicio duró un día.
Su hermano fue asesinado en mayo del 2018 durante las protestas.
Este artículo del Washington Post lo describe a detalle:
Ayer fue condenada Ana Margarita Vigil, expresidenta de UNAMOS antes Movimiento de Renovación Sandinista fue juzgada ayer y declarada culpable por "cometer menoscabo a la integridad nacional en perjuicio del Estado de Nicaragua y la sociedad Nicaragüense".
Al firmar su condena, escribió debajo de su nombre: "Soy Presa Política".
Definitivamente, los presos políticos se encuentran en un estado de indefensión total con el que el gobierno atemoriza a la sociedad.
Un ciudadano normal en un país democrático agradece a Dios no tener que pasar por los juzgados, pero en países como Cuba, Venezuela o Nicaragua el sistema judicial es una película de terror para la gente, totalmente escalofriante.
Solo puedo decir que ayer sí derramé lágrimas de impotencia, pero me aferro a la esperanza de que voy a ver el fin de este régimen de terror.