La piedra en el zapato

Gerson Gómez DETONA: Nuestras alarmas sonaron a la misma hora, la rutina de llevar a los hijos a la escuela, próxima al barrio, se acabaron las vacaciones, momento de trabajar para cerrar el año 2024.
Agosto ha sido bueno.
  • Sin la afectación violenta de la canícula.
  • El país entero pasado por agua.
  • Salvo a los vecinos de Chalco.
  • Los desheredados de siempre.
  • Los del bordo.
  • Ahí desborda todo.

Somos legión camino a la escuela.

  • Zonas de baja velocidad.
  • Nada por encima de 30 kilómetros por hora.
  • Las calles nuestro campo de batalla.
  • Avanzar por centímetros.
  • La sabiduría va en sentido contrario.
  • Estreches de corazón, reducir carriles.

Caminante no hay camino, tampoco hay vereda al andar.

Exclusividad para bicicletas.

Alguien en sano juicio los lleva a los menores.

Lo dudo.

Cada fila explota el corazón.

Mañana será más temprano la levantada, les decimos a los hijos.

Mejor nos cambiamos más cerca o nos quedamos a dormir afuera conminan al padre conductor.

A eso le llaman suburbios en el gabacho.

Incluso escalonan el horario para entrar a trabajar.

Interpretar los sueños de los alcaldes dista mucho de los planes de progreso.

Entrampados en la zona, replicantes de duro entendimiento.

Las piedras en el zapato.
  • Acelera.
  • Frena.
  • Acelera.
  • Enciende el aire acondicionado.
  • Acelera.
  • Frena.

La cefalea coquetea apenas a las siete de la mañana.

  • Dos paracetamoles.
  • El café bien cargado.
  • Bajen rápido.

El crimen es vivir en la ciudad.

Esto no sucede en el campo.

  • Frena.
  • Corran niños.

Tengan el mejor regreso a clases.

Ponen atención, hasta luego.
Gerson Gómez

Morelense de cepa Regiomontana. LCC con especialidad periodismo (UANL). Doctor en Artes y Humanidades (I.C.A.H.M.). Tránsfuga de la mesa de redacción en diferentes periódicos como El Diario de Monterrey, Tribuna de Monterrey, y del grupo Reforma en el matutino Metro y vespertino El Sol. Escort de rockeros, cumbiamberos, vallenatos y aprendices al mundo de la farándula. Asiste o asistía regularmente a conciertos, salas de baile, lupanares, premieres, partidos de fútbol y hasta al culto dominical. Le teme al cosmos, al SAT, a la vejez y a la escasez de bebidas etílicas. Practica con regularidad el ghosting. Autor de varios libros de crónica como Hemisferio de las Estaciones, Crónicas Perdidas, Montehell, Turista del Apocalipsis, Monterrey Pop y Prêt-à-porter: crónicas a la medida.