Irreverente
Obsoletos absolutos
También podría titularse esta columna como “jubilados obnubilados”.
Miércoles, 1 de febrero de 2023, 03:36 P. M.
Calderón DETONA aquí.
San Antonio, Tx.
Les platico:
¿A quienes me refiero?
A los que...
- Esgrimen reiterada y cansadamente el “algoritmo” de la “soberanía nacional” para argüir que nadie de afuera debe siquiera osar opinar adentro sobre nuestras desgracias actuales, pero se hacen bueyes cuando el presidente que eligieron anda de “tour injerencista” en el el Perú.
- Cuelgan sus complejos y famélicas autoestimas en los tendederos de chats, de twitter y otras plagas mal llamadas “redes sociales”.
- Usan recursos retóricos para defender sus propiedades en las mismas redes.
- Tienen mentalidad mitológica e ideológica.
- Fomentan en sus tribus la idea de que quien piensa diferente es su enemigo.
- Se refugian en la efímera seguridad tribal de sus propios grupos.
- Leen "amenaza" en una promesa.
- En plena era digital actúan como vegetal, “Tal Cual”.
-
Son termitas de la libertad de expresión.
- Tienen mentes cavernarias, silvestres y primitivas que están formadas en las filas del siglo XXI cuando deberían de estar haciendo cola en las del XIX.
- Viven vidas imaginarias.
- Vuelan avioncitos de papel y se sienten aviadores para defender al AIFA sin haber estado ahí, pero sus hijos, nietos y parentela, sí.
Calderón DETONA aquí.
- Opinan con “falsa propiedad” de México, sin tributar fiscalmente ahí, desde que se fueron a vivir a Estados Unidos, donde -por cierto- tampoco tributan.
- Sin ser periodistas ni estar debidamente informados “dan las noticias” en twitter y en sus chats.
- Usan celulares más inteligentes que ellos mismos.
- Por conveniencia le piden ayuda al “amigo” y en la primera discrepancia lo desconocen.
- Están a dieta de calorías… de intelecto.
- Casi matan por la 4T pero fueron emBOLAdos y alimentados por los neoliberales del PRI y el PAN a los que traicioneramente hoy les muerden la mano.
- Presumen amistad y paz en sus grupos, pero se arrodillan ante las arengas de odio que les dicta el oráculo del palacio.
Calderón DETONA aquí.
Todos éstos tienen nombres y apellidos pero son tantos que mejor cuelgo aquí el saco para que quien se sienta aludido, se lo ponga.
Y todo esto, no es cuento...
¡es cuanto!…
CAJÓN DEL SASTRE DE PANAMÁ.
“¿Entendido?”, remata la irreverente de mi Gaby.
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