Política

Talibanes se adueñan de armas, helicópteros y aviones de combate provistos por EU

No sólo tomaron el poder político, sino también el poder de fuego proporcionado por Estados Unidos: armas, municiones, helicópteros y más.

Las fuerzas de seguridad afganas, formadas y entrenadas a un costo de 83,000 millones de dólares durante dos décadas, se han derrumbado con tal facilidad y rapidez -en algunos casos sin disparar un solo tiro- que los beneficiarios finales de la inversión estadounidense han resultado ser los talibanes.

No sólo tomaron el poder político, sino también el poder de fuego proporcionado por Estados Unidos: armas, municiones, helicópteros y más.

Los talibanes tomaron diversos equipos militares modernos cuando vencieron a las fuerzas afganas que fracasaron en la defensa de sus distritos.

A esto le siguieron mayores ganancias, incluidos aviones de combate, cuando los talibanes arrasaron las capitales provinciales y las bases militares con una velocidad sorprendente, todo ello coronado con la captura del premio mayor: Kabul, durante el fin de semana.

Un oficial de defensa de Estados Unidos confirmó el lunes que los talibanes han acumulado una cantidad enorme de equipo afgano suministrado por Estados Unidos.

El funcionario no estaba autorizado para discutir el asunto públicamente, por lo que habló bajo condición de anonimato.

El fracaso de Estados Unidos en la creación de un ejército y una policía afgana autosuficientes, y las razones de su colapso, serán estudiadas durante años por los analistas militares.

“Las características básicas, sin embargo, están claras y no son diferentes de lo que ocurrió en Irak. Las fuerzas resultaron ser huecas. Estaban equipadas con armas superiores, pero carecían del ingrediente crucial: motivación para el combate. El dinero no puede comprar la voluntad. No se puede comprar el liderazgo”, dijo el lunes John Kirby, portavoz del secretario de Defensa, Lloyd Austin.

“El principio de la guerra no cambia: los factores morales dominan a los materiales”, dijo.

“La moral, la disciplina, el liderazgo y la cohesión de las unidades son más decisivos que el número de fuerzas y equipos. Como foráneos en Afganistán, podemos aportar material, pero sólo los afganos pueden brindar los factores morales intangibles”.

 

Con información de EFE.