Baterías de Litio: El lado oscuro de la Revolución Verde
Nos vendieron la movilidad eléctrica como la solución definitiva para salvar el planeta.
- Carros sin emisiones, baterías con autonomías de infarto y el sueño de un mundo donde los escapes de humo negro fueran cosa del pasado.
Pero, como en toda historia, hay un pequeño detalle que olvidaron mencionar:
¿qué pasa con esas gloriosas baterías de litio cuando mueren?
Ah, el gran secreto sucio de la revolución verde.
Mientras el mundo celebra cada auto eléctrico vendido, hay una creciente montañita de baterías inservibles acumulándose sin una solución clara.
Y no, no se biodegradan, ni se desintegran en polvo mágico.
Lo que hacen es convertirse en un problema ambiental de proporciones épicas.
De aquí al 2050, en América Latina y el Caribe, entre 6.6 y 7.5 millones de toneladas de baterías de iones de litio llegarán al final de su vida útil.
A nivel global, hablamos de más de 20 millones de toneladas.
Pero hey, detalles, ¿no?
Mientras que en Europa, Canadá y Estados Unidos ya trabajan en la recuperación de metales críticos de estas baterías para que la economía circular tenga sentido, en México estamos, pues... empezando.
Actualmente, solo una empresa realiza la recuperación de estos metales en su etapa inicial y su capacidad es mínima.
Pero aquí es donde entra Ecolimpio.
Nosotros no estamos aquí para aplaudir de lejos.
Ya trabajamos con grandes generadores internacionales, y estamos en camino de sumar más fabricantes a la lista.
Actualmente, ya recibimos estas baterías, lo que marca el inicio de nuestra participación en esta cadena de valor.
Estamos en las etapas iniciales del desarrollo de tecnologías de reciclaje avanzado, posicionándonos como pioneros en este proceso en México.
A diferencia del resto, no queremos quedarnos en la recolección básica: buscamos meternos de lleno en la recuperación de metales críticos como litio, cobalto y níquel, que son la materia prima para nuevas baterías.
Es decir, darle un verdadero sentido a la "economía circular" en el sector.
Y si no lo hacemos, ¿a qué nos enfrentamos?
A montones de baterías olvidadas, llenas de materiales valiosos, desperdiciándose en almacenes o en confinamientos inseguros.
A la dependencia total de mercados extranjeros para proveernos de estos metales, mientras aquí los dejamos enterrados.
A una ironía brutal: apostar por la sostenibilidad sin resolver el problema del reciclaje.
Por eso, en lugar de dejarnos aplastar por la ola de baterías muertas, en Ecolimpio estamos tomando el toro por los cuernos.
Nuestro plan no solo nos hará líderes en acopio y reciclaje en México, sino que nos conectará con los grandes jugadores de la industria a nivel mundial.
Sabemos que el camino es largo, pero alguien tiene que empezar a hacer las cosas bien.
Así que la próxima vez que alguien te diga que la movilidad eléctrica es la solución a todos nuestros problemas ambientales, pregúntale:
"¿Y qué pasa con las baterías?"