De mujer a mujer: La fuerza de un corazón
¿Has escuchado la frase, “una mujer es la peor enemiga de otra mujer”?
Qué triste, ¿no?. Y realmente, creo que es cierto… en algún momento de la vida, quizá a todas nos ha pasado que hemos envidiado, criticado, juzgado o tratado mal a otra mujer, por alguna razón.
Sin embargo, debemos comenzar por no juzgarnos a nosotras mismas, a no ser tan exigentes con nuestro cuerpo y ser más tolerantes, ver las cosas positivas que tenemos, lo que hemos logrado, los éxitos, la salud, la familia, simplemente el regalo de la vida y sobre todo, el SER MUJER.
La esencia de ser mujer es algo mágico, es un super poder que nos brinda la vida, es ese sexto sentido que nos caracteriza, el tener la capacidad de hacer y escuchar muchas cosas al mismo tiempo, la habilidad de lograr que el día parezca que dura 57 horas por haber hecho tantas cosas, pendientes, vueltas, tareas, etc.
En esta época de pandemia ha surgido un nuevo poder de la mujer: HOME OFFICE, HOME SCHOOL o AMBAS.
Esto ha sido algo nuevo, difícil, retador para aquellas mujeres que trabajan en una empresa desde casa y que además,tienen hijos con los que tienen la responsabilidad de guiarlos desde la computadora con sus clases de la escuela en línea, un modus operandi que jamás habíamos vivido.
Ha sido difícil, es por eso que aplaudo que la revista TIME le ha hecho honor a la mujer, reconociendo la gran labor de aquellas que trabajan desde casa, apoyando con la limpieza, las tareas domésticas, el trabajo de oficina y el home school de sus hijos, merecido reconocimiento.
Muchas mujeres alrededor del mundo han descubierto un lado diferente de sí mismas, pues el hecho de que la vida cambió, cambian las rutinas, el tiempo de calidad, los horarios, las actividades, que a pesar de que al principio se veía imposible, poco a poco nos hemos ido adaptando a esta famosa nueva normalidad.
Nadie se hubiera imaginado que el “quédate en casa” duraría 1 año. NADIE. Y es por eso que es admirable la paciencia que las mamás han tenido para seguir guiando a sus hijos en el camino de la educación, el intentar que sigan aprendiendo y siguiendo un programa de escuela para que no se atrasen, el hecho de mantenerlos activos con algún deporte, clase extraordinaria, baile, arte, fútbol, a pesar de la circunstancia y del cambio drástico de la modalidad en la que se tomaba una clase.
Las mamás han estado luchando todo este año por que sus hijos sigan adelante, tanto en el tema escolar, educativo, social y también, encontrando de alguna u otra forma que no caigan en depresión, en vicios, o en malos hábitos por el encierro.
Pero… ¿y quién se preocupa por las mamás que desde que se levantan, lo primero que piensan es en que sus hijos estén bien, que sea un día productivo, un día de aprendizaje, de alegrías, de tiempo de calidad en familia?.
Creo que las mamás caen en segundo plano. Es por eso, que en este artículo quiero recordarle a aquellos padres de familia y a todos los hombres en general:
ESTE MUNDO ES MEJOR POR LAS MUJERES.
Solamente hay que ver la vida desde un punto neutral, analizando la aportación que hacemos las mujeres a este mundo.
Has entrado a alguna oficina o casa y que se escuche la típica frase: “Aquí le falta el toque femenino”, o al revés, “Se nota que aquí vive una mujer”. CLARO, porque es esa magia que nosotras aportamos a este planeta, es esa esencia que nos hace únicas, esa naturaleza de siempre cuidar, dar amor, dar cariño, armonía, crear espacios con calor de hogar, eso lo traemos en la sangre.
Tengo la gran bendición de ser mamá desde hace 3 meses y sigo impresionada por lo sabio que es nuestro cuerpo, por esa capacidad que tenemos de que una nueva vida se desarrolle dentro de nosotros con salud, que 2 corazones latan en un mismo cuerpo, de esa chispa tan natural que provoca un amor INMENSO de un día para otro, un amor incondicional, una entrega total a un ser nuevo que es carne de tu carne, del que tienes total responsabilidad, que las desveladas y el cansancio son premiados por solo ver la mirada de ese bebé. Es algo indescriptible que sé que las que son mamás entienden a la perfección.
Todas tenemos una vocación. Y sea la vocación que sea, las mujeres impregnamos eso que es único para que este mundo cada vez sea mejor, esa creatividad, sensibilidad, empatía, entrega, provocan un ambiente que genera mejores resultados, en hombres y en mujeres.
Cuando veas a una mujer de mal humor, cansada, triste, fastidiada… NO LA JUZGUES. Acuérdate que “juzgar a una persona no define quién es ella, define quién eres tú”. Debemos de ser más tolerantes, pensar que todos tenemos nuestros propios problemas que tenemos que resolver y que todos podemos tener un mal día.
Mujer, no envidies, por eso todos somos ÚNICOS E IRREPETIBLES, con nuestros defectos, pero también con nuestros talentos. Porque no existe una regla general como nos han hecho ver los medios de comunicación y los falsos estándares de belleza, quiérete como eres, cuida el amor propio, lee cosas positivas, motívate, verás que entre más te quieras a ti misma, más vas a reflejar FELICIDAD.
Regálate un tiempo diario solo a ti, un momento de pausa, de lectura, de oración, de meditación, de escuchar un podcast, de ver tu serie favorita, de respirar profundo y cuidarte, SIN SENTIMIENTO DE CULPA. Permítete disfrutar de ti misma, de tomarte ese café, de escribir, de cantar, de bailar, date ese tiempo de hacer ese pasatiempo que siempre dejaste en el olvido, HAZLO, hazlo ahora por que la vida se pasa en un abrir y cerrar de ojos.
Mujeres: somos un equipo, apoyémonos entre todas, motivemos a la que lo necesita.
Acuérdate que aplaudir y apoyar el éxito de la otra, no te quita el tuyo. No nos lastimemos, más bien, unámonos, tenemos el poder de dar mucho para que este mundo pueda ser cada día mejor, que puedan regirse leyes desde el punto sensible del ser humano, con el fin de que puedan ser utilizadas para mejorar vidas, para hacer más justicia.
Hoy le hago un homenaje a TODAS LAS MUJERES, de todas las edades.
Todas merecemos un trato digno, ser admiradas por la gran labor diaria que a veces nadie agradece ni valora. No somos más, ni menos, no somos el “sexo débil”, somos SERES HUMANOS con los mismos derechos para vivir de manera JUSTA. Aguantamos más de lo que creen.
Hombre, te invito a que hagas una pausa y te imagines este mundo sin mujeres, sin todo lo que te han entregado para ser el hombre que eres hoy, (empezando por la vida misma), sin el amor, el cariño, los consejos, el apoyo, la música, el alimento, los detalles… ¿no sería lo mismo, cierto?. Si tienes la bendición de tener a tu mamá, a tu esposa, hijas, abuelitas, amigas… QUIÉRELAS, Y QUIÉRELAS MUCHO.
Gracias mujer por esa lucha diaria e incansable, por siempre estar dispuesta a ayudar, a querer, a cuidar… y sí, los super héroes sí existen, y te lo confirmo: Felicidades, tú eres la MUJER MARAVILLA.