El COVID y el diablo de los números

Las cifras de la muerte son el resultado triste de las olimpiadas del fracaso en salud pública.

Primero pensamos que eran vacaciones. “En 15 días volvemos.”

Y nada: el confinamiento va que vuela para el año. Y a como andan los números, los semáforos y las ocurrencias de los que gobiernan, esto va para largo.

Los números, aunque debieran ser exactos, a veces cuadran y otras no. Los remedios a veces curan. Los políticos no atinan casi nunca.

Ciento dos millones de contagios en el mundo. Dos millones 206,873 personas han perdido la vida. 56.4 millones de contagiados la han librado (Universidad Johns Hopkins).

PAÍSES MÁS CASTIGADOS

Por cada 100,000 habitantes, según la Organización Mundial de la Salud: Bélgica, 181 decesos; Eslovenia, 167; Reino Unido, 154; República Checa, 151 e Italia, 145.

No quiero sonar pesimista, pero los números de la muerte parecen ser el resultado triste de las olimpiadas del fracaso en materia de salud pública.

La autopsia dirá si miento:

Estados Unidos = a 436,810 muertos. Brasil = 222,666; México = 156,579. India = 154,147. Reino Unido = 104,371 decesos.

La suave patria no canta mal las rancheras. Con un millón 841 mil 893 casos, del 1 al 14 de febrero, justo cuando los amorosos celebran su día, 13 entidades federativas se pintarán de rojo. Nuevo León (of course), entre ellas.

Leí hace poco la novela "Arenas movedizas",  de Henning Mankel, que narra en uno de sus capítulos la peste de París en el año 1348.

Los parisinos creían que los culpables eran los gatos y las pequeñas bestias peludas fueron exterminadas, muchos de ellos terminaron en las aguas del Sena. “Los cementerios estaban atestados".

Ya no quedaban personas que enterraran a los muertos, los dejaban que se pudrieran en las casas y en las calles.

"Los sacerdotes abandonaban a los moribundos al comprobar que ellos también estaban contagiados y debían preparar su propia muerte.”

Las cosas no terminaron ahí. “Los perros de la ciudad acudían allí por las noches para devorar los cadáveres, que estaban enterrados bajo una finísima capa de tierra.”

EN CORTO. MIENTRAS ESCRIBO ESTO...

...Mi madre pasa por una temperatura de 39 grados; ha perdido el sabor y el gusto y está toda desganada.

Tiene 85 años y mis ocho hermanos y yo no queremos pensar lo peor. ¿Cómo llegó a enfermarse en confinamiento total? Como dice una novela de Daniel Sada: "Porque parece mentira la verdad nunca se sabe".

Volviendo al tema: tres variantes del coronavirus han sido detectadas en Brasil, Reino Unido y Sudáfrica, y exportadas a 14 países (OMS).
Así las cosas. A esperar turno para la vacuna.

Margarito Cuéllar

Ganador de galardones de poesía en México, Ecuador, Francia, España y China. El más reciente fue la edición 2020 del Premio Hispanoamericano de Poesía Juan Ramón Jiménez en Huelva, España. Miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte en el área de letras.  Maestro en Artes por la UANL. Ha publicado crónicas, entrevistas y artículos para medios locales y nacionales. Autor de una veintena de libros de poesía. Maestro universitario, promotor cultural y editor. Autor del libro de cuentos Los riesgos del placer y compilador de la obra José Alvarado (Cal y Arena/ UANL, 2018).