Round 2. En esta esquina, AMLO, y en esta otra, la clase media

Fragmento de publicación en “El Norte”, de Claudia Guerrero y Antonio Baranda (12 junio 2021):

“En estas últimas semanas, ataca AMLO a clase media. Tras los resultados electorales del domingo (6 de Junio), el Presidente Andrés Manuel López Obrador se lanzó ayer contra las clases medias, a las que calificó de "egoístas y que quieren triunfar a toda costa".

Cuando López Obrador usó algunas de esas palabras (egoísta, clasista, racista), pareció definirse a sí mismo.

Y surgen las preguntas:

¿Cómo el supuesto servidor del pueblo o primer mandatario puede atacar así a la clase socio económica que genera ingresos, impuestos, creatividad, desarrollo, etc.  y que representamos más de la tercera parte del país?

¿No es el primer deber del presidente “cumplir y hacer cumplir la Constitución”?

¿Y al injuriar o calificar negativamente a todo un sector del país viola la misma, al estar agraviándolo o acusándolo sin fundamento legal, lo cual constituye un delito federal? (me gustaría la opinión de un abogado constitucionalista).

¿Cómo las autoridades judiciales le permiten insultar así a esta gran parte de la población? En sus palabras calificó a la clase media de “clasista” y “racista”, solo porque no apoyan a su plan.

¿En que &#$*$# país vivimos...

...que un megalómano y corrupto funcionario puede decir tanta falta de respeto, descalificaciones e insultos a tantos ciudadanos de la clase media, como ya lo hizo con empresarios y la clase alta del país, sin que lo censuren y lo castigue autoridad alguna?

¿Qué se deduce de esto?

No hay autoridad que se atreva a parar este discurso de descalificación, agresión verbal y de división sistemática, con lo cual busca la aprobación y el voto en cada contienda electoral de las clases bajas, que paradójicamente son la más lastimadas por sus inútiles y negativos programas de gobierno.

Y si las hay (autoridades), las tiene compradas o amenazadas el presidente con sus lacayos de la UIF o con las amenazas de “plata o plomo“ típicas de las bandas criminales ya abiertamente cómplices de la 4T.

Vean las visita de AMLO a las fiesta del hijo del narcotraficante más popular de México, los estados ahora gobernados por Morena, y los nefastos resultados de la acciones de la guardia civil en puertos y aduanas del País.

La primera etapa de la división fue contra la clase alta y empresarios de México.

EL PRESIDENTE MAQUIAVÉLICO

Esta segunda etapa del divisionismo es ahora contra la clase media, que obviamente despertó en contra de Morena y especialmente de López Obrador, y claramente afectó el resultado de las elecciones del pasado 6 de junio que interrumpió el maquiavélico plan totalitario del presidente y sus cómplices latinoamericanos, un presidente traidor a la patria y a cada una de las clases sociales del país.

Esto demostró que la clase media de México tiene las agallas, y cuando se propone, la casta necesaria para defenderse de ineptos y traidores.

AHÍ VIENE LA VIOLENCIA

Si como nación lo dejamos seguir, además de la evidente confrontación de los ciudadanos unos contra otros, viene la violencia que se puede generar, y abren camino a las leyes de eliminar el derecho a la propiedad privada (obviamente de las clases alta y media), que ya se asoma en sus intenciones socialistas en una supuesta nueva Constitución.

El siguiente paso de la 4T, después de desacreditar a la clase media será ir en contra de los diferentes sectores de la clase baja entre ellos: sindicatos, mini empresarios, agricultores, ejidatarios, líderes religiosos, en fin todos contra todos.
El que tenga oídos que oiga y el que tenga ojos que vea, ya que nadie dice esta boca es mía.

Nos toca reaccionar de inmediato a las acciones divisionistas de este nefasto presidente y sus partidos paleros como son morena y el verde, presionar legalmente con todos los medios posibles a las supuestas autoridades que no lo detienen, y cuidarnos de una posible traición en el Congreso, del nefasto y corrupto PRI, que lo ayudó a llegar al poder en 2018, y lo ha apoyado en el Senado.