Las Sub-20 Femenil: hasta el momento, lo mejor del año para México

El miércoles pasado asistí a un restaurante para ver el partido de la Sub 20 femenil contra Nueva Zelanda. Al entrar y esperar mi mesa había grupos de jóvenes, algunos con mujeres esperando que les asignarán mesa, lo cual me pareció muy bueno, siempre he sido un convencido que no se le puede llamar al futbol el deporte más universal, cuando hay un clarísimo rezago en la incorporación de la mujeres en este deporte, así que espere me asignarán una mesa.

Este año ha sido de resultados pobres para las Selecciones Mexicanas de futbol, en ambas ramas no se calificó a la Olimpiada del 2024 y la femenil mayor sin anotar gol en la eliminatoria en casa también quedó fuera del mundial 2023.

El año lo salva la selección Sub 20 femenil que en marzo en el Campeonato de la CONCACAF Femenil de la categoría, logró el segundo lugar perdiendo 2-0 con Estados Unidos la final, eliminando en la semifinal a Canadá, con un récord de seis juegos ganados sin empate ni derrota, incluyendo la semifinal y un diferencial de goles 27 a favor por uno en contra.

Tomé mi lugar en el establecimiento, ordené mi bebida y le pedí al mesero que si podía poner en algunas de las pantallas el previo del partido de la Selección Mexicana. En ese momento ya estaba en curso el partido de la final de la Supercopa de Europa entre el Frankfurt y el Real Madrid.

El mesero no supo de qué partido le hablaba y me indicó que el partido ya estaba en curso en la pantalla, que el partido de México no era de Selección, que era el de Estrellas de la MLS y que era hasta la noche, revisé para descartar que el equivocado fuera yo, en ese momento me interrumpieron los gritos de los aficionados al Real Madrid que festejaban el primer gol marcado por Alaba que ponía adelante al equipo español.

Ustedes podrían decir, bueno es una competencia de la CONCACAF, es lo mínimo que se podía esperar, México es el líder del área, etc., etc., pero yo no recuerdo hace cuánto tiempo la Selección mayor califica en una competencia regional con esa holgura y autoridad a las rondas finales.

Solo hay que recordar que la Selección mayor en eliminatorias mundialistas, en el mes de enero apenas empata a cero con Costa Rica como local, en marzo igual empata igual a cero de local con Estados Unidos y en junio iguala a uno con Jamaica de visitante, por eso no debemos dejar de reconocer esos seis triunfos seguidos y diferencial de 27 a favor y uno en contra incluyendo ganarle a Canadá en la semifinal.

En el medio tiempo de la final de la Supercopa de Europa y pensando que como el partido de la selección comenzaba a las tres de la tarde, supuse que hasta ese momento lo pondrían en una pantalla, pero no fue así.

Comenzó el segundo tiempo de la final de la Supercopa.

Mi curiosidad era si solamente yo estaba pendiente de este partido y pregunté nuevamente por la posibilidad de que pusieran la transmisión en algunas pantallas, incluyendo otro cuestionamiento a mi petición, “¿soy el único que ha pedido ese partido?”.

Con mucha educación y una excelente atención por parte del establecimiento y sus colaboradores, me complacieron con un partido femenil de repetición en algunas pantallas y me indicaron que nadie había solicitado ver el partido de la selección mexicana.

En un partido que todo el tiempo dominó la selección mexicana, terminó con el empate a un gol, viniendo de atrás y con muchas más opciones claras de gol que las neozelandesas.

Al minuto 30 en una llegada hasta tres cuartos de cancha, Grace Wisnewski con un tiro de media distancia ante una defensa mexicana bien parada atrás, consigue el gol que pone adelante a Nueva Zelanda 1 - 0.

La defensora Carol Cázares desvía con su espalda tiro de Wisnewski, el cual cambia de trayectoria obligando a la arquera Celeste Espino a cambiar al lado contrario su recorrido bajo el arco, lamentablemente no queda en una posición cómoda y no tiene oportunidad de desviar el balón fuera del arco, siendo así vulnerada su portería con el primer gol del partido a favor de la selección de Nueva Zelanda.

Los gritos de gol volvieron al lugar, eran aficionados y aficionadas del Real Madrid festejando el tanto de Benzema que ponía en marcador definitivo de la final.

Se habla mucho de la igualdad de las ligas femeniles, las oportunidades, los patrocinios, los espacios en los medios y sobre todo el ingreso y condiciones laborales de las jugadoras de futbol, con matices entre países, pero siempre con la constante de un abismo de diferencia entre la rama varonil y la femenil.

Pongamos nuestro granito de arena, llenemos un bar o restaurante para ver a nuestra selección, veamos resúmenes en Internet, hagamos que las televisoras hablen más de las ligas o selecciones femeninas y no solo cuando fracasan o salen problemas extra cancha a la luz, hagamos que antes de un partido europeo, el atractivo sea ver a nuestra selección, sobre todo si ha conseguido resultados.

Un minuto antes del final del primer tiempo, una jugada por el lado derecho, después de que una defensora neozelandesa, dentro de su área, desvió el centro de las mexicanas, el balón quedó a la deriva para que Anette Vázquez con el pie izquierdo apenas lo empujara y anotara el gol del empate a uno, marcador que a pesar de una media docena de llegadas de la selección mexicana en el segundo tiempo, encabezadas por Mauleón y Villanueva, no se modificó para dividir un punto para cada equipo en esta primera jornada de la fase de grupos.

Un buen partido de las mexicanas, bien planteado, donde lo único que podríamos señalar en contra es la falta de contundencia, pero muy lejos en lo positivo de lo ocurrido en Monterrey hace unas semanas con la Selección mayor de la rama.

Deseo que en el siguiente partido de la selección Sub 20 femenil, se refleje de mejor manera en el marcador su esfuerzo y buen desempeño, que contra Colombia logren la calificación a la siguiente ronda. 

Vale la pena darle a este grupo de jóvenes jugadoras la oportunidad de ilusionarnos, hasta el momento considero que se lo han ganado.

Como aficionados espero que pongamos de nuestra parte y les demos más apoyo, porque pocas veces como aficionados de selecciones mexicanas de futbol, a esta le estamos quedando a deber.