Violencia Vs. violencia 8 de marzo
Con motivo de los eventos conmemorativos del 8 de marzo, conocido como Día de la Mujer, y en relación a los hechos suscitados en el estado de Nuevo León, me di a la tarea de platicar con mujeres lideres de colectivos y organismos de la sociedad civil; ellas son importantes lideres de opinión a quienes pregunté su punto de vista y coinciden en varios de los puntos.
Todas ellas son muy activas en diversos temas sociales, pero más en cuanto a los temas de defensa de los derechos de la mujer.
Concuerdan en que es muy importante manifestarse y hacerse presentes, recordar a las autoridades que hay muchos pendientes en cuanto al respeto de sus derechos, así como muchas investigaciones y procesos donde se esperan sanciones ejemplares para quienes se han atrevido a maltratar a algunas de ellas; en otros casos, muy lamentable la ausencia de quienes ya no pueden reclamar justicia porque su vida fue apagada por la razón que haya sido pero que deja un vacío en una familia y en la sociedad.
Hasta esta parte, creo que cada quien, a su estilo, están de acuerdo en que se deben expresar y hacer un llamado serio a las autoridades y a la sociedad en general de que existen temas pendientes de resolver, algo a lo que se le llama el patriarcado.
Por otra parte, hay coincidencias en que la mejor manera de expresarse en sus sentimientos y más en el tema del respeto a los derechos e igualdad de oportunidades, la conquista de posiciones de mando y poder sea en igualdad de opciones tanto para mujeres como para hombres, en la vida pública, como en la privada.
Que yo tenga conocimiento, ninguna de mis amigas ha sufrido la pérdida de algún integrante de su familia por estas violencias que se reclaman, y de todo corazón espero que nunca tengan ese tipo de experiencias en sus vidas. No se pretende de ninguna manera juzgar a quienes protestan y alteran el orden, por decirlo de una manera muy tenue, probablemente en su pena les motive a sacar ese sentimiento de dolor que se convierte en dañar lo que esté a su paso; en este particular, les consulte a las amigas activistas y me dicen que las mujeres de Nuevo León NO son así, varias de ellas tienen la sospecha de que las chicas que causaron daños en el Palacio de Gobierno no son de aquí y que fueron reventadoras a sueldo; obvio esta es una conclusión de ellas, pero llama la atención que varias piensan en lo mismo.
Desde mi óptica, en mi experiencia como activista que participé en muchas manifestaciones y actos de protesta, sí, pero en ninguno violentamos o dañamos, los de la legitima protesta, pero sí los que llegan a echar a perder una expresión ciudadana de inconformidad ante las autoridades en funciones, mediante generar caos y violencia, con la destrucción, rotura de vitrales, pintas y ahora hasta con fuego, similar a lo que ocurrió de enero de 2017, que luego de tener una protesta pacífica por el tema de aumento de impuestos y valor de la gasolina, donde se congregaron muchos ciudadanos en esa Explanada de los Héroes, llegaron reventadores directos a causar daños al inmueble de valor histórico.
Nunca estaré de acuerdo en que para reclamar la violencia se use más violencia.
Actualmente, el mundo vive inmerso en la violencia de muchos tipos; lo que menos ocupamos es más actos que hagan perder el sentido de la causa.
Lo que sí debemos de ver como sociedad es la manera de educarnos como pueblo y ser respetuosos de la mujer en todos los sentidos y que todos tengamos claro que no son objetos, mucho menos artículos de complacencia; que en caso de tener una relación, debe ser consensuada por los que toman parte en ella; que no debemos permitir que nadie les maltrate, ni les violente de ninguna forma; las mujeres acompañadas pidan a sus parejas que ayuden a otra que requiera de ayuda y no nieguen la ayuda por celos de alguien que no conocen.