Contaminación en Monterrey: cuestión de vida o muerte
El tema de la contaminación se ha convertido en cuestión de vida o muerte en San Pedro, Monterrey y Cadereyta, comparable con Morena:
O lo combatimos, o acabará con todos.
Por eso, es incomprensible que no se hayan levantado las voces de más peso y fuerza en el estado, exigiendo al gobierno estatal y federal las medidas de emergencia y clausura temporal necesarias de la Refinería Cadereyta.
¿En dónde están las cámaras empresariales, el grupo de los 8 o 10, los precandidatos, los líderes vecinales, ambientalistas, etc?
¿En dónde quedó el famoso estudio del Centro Mario Molina que costó 10 millones de pesos y se hizo en la administración del Bronco?
¿Por qué no exigir se haga público para ver a quién o a quienes protegen?
Al parecer, hasta el momento los únicos que dijeron "ya basta", han sido el alcalde de San Pedro y su precandidata, Vivianne Clariond.
Pero como ellos no son autoridad de peso, ni en el gobierno estatal ni federal, nada va a cambiar a nuestro podrido aire que respiramos.
Los que sí hemos cambiado, y mucho, somos los regiomontanos: nuestra apatía, cobardía, desinterés en el bien común, búsqueda de intereses particulares y vivir de apariencias y presunciones nos han llevado a los desastres políticos, ambientales, de inseguridad, movilidad y más que hoy vivimos.
Por eso, hoy solo queda parafrasear a Porfirio Díaz y concluir: