Los delgados límites de la sanidad
Rebasamos todo espectro de la imaginación.
Cada mañana se pontifica desde Palacio Nacional. Al interior del país, las agendas de los caciques electorales conocidos como gobernadores, les quedan a deber a sus electores.
Preparan las maletas para las siguientes participaciones sociales. Mueven sus alfiles. Aperturan las chequeras en comunicación social. Los donantes empresariales confirman a sus frentes. Les avalan con el sudor de sus inversiones.
Preparan las maletas para las siguientes participaciones sociales. Mueven sus alfiles. Aperturan las chequeras en comunicación social. Los donantes empresariales confirman a sus frentes. Les avalan con el sudor de sus inversiones.
Los juegos de cartas están cargados. Camarillas de hampones. Ni siquiera los de menor edad, El sabor del poder les modificó el adn de las buenas intenciones. Pulverizo los discursos del canto eterno por un cambio permanente.
Samuel García, Clara Brugada, Evelin Salgado, Manolo Jiménez y Luis Donaldo Colosio, ente muchos de los protagonistas, parlotean sin identidad. Usan la peor de las insensateces.
Maldicen en lengua vernácula. En los tribunales, como acostumbran, el equipo de sus cuartos de guerra.
Los buscapiés de las revistas polvorosas. Los espectaculares en las avenidas. Banderear los domingos. Ya viene la cargada. Faltos de pericia. Enajenantes.
Morirá el 2023. Los deudos de la participación humanitaria, los detractores de los tres poderes nacionales.
Corramos a las colinas. A protegernos de la caballada famélica. En nuestras ermitas, las bombas publicitarias nos darán la bienvenida. Advertidos estamos.