¡Mentiroso, nos engañaste!
La mañana del viernes 1 de septiembre, alrededor de las 9:00 horas. En el grupo de WhatsApp de la familia, uno de mis hermanos compartió el video de un admirado y querido empresario restaurantero de San Pedro Garza García. El clip iba acompañado de un sentido y emotivo mensaje: “Lamentable”.
Muy lamentable, respondí. “Conozco a Beto Frías”.
Mi mamá enseguida agregó: “Sí, muy lamentable. Cuántos negocios más estarán así en Centrito”.
Pero fue mi esposa la que encendió mi enojo y a su vez, detonó el recuerdo de los buenos tiempos y la nostalgia. Ella me escribió directamente: “Lo que están haciendo en Centrito es un efecto Hawái”.
Vámonos paso a paso...
Me dio mucha rabia pensar en un alcalde irresponsable, descuidado y cobarde. Miguel Treviño acabó con el patrimonio de centenares de empresarios neoleoneses y con las fuentes de trabajo de miles de empleados de la zona del Centrito.
Miguel Treviño lastimó a muchísimas familias que confiaron en él. Es inverosímil que en el municipio más acaudalado de todo México, no pudieron contratar a la constructora más fregona, para las obras públicas de mejoramiento en el corazón comercial de San Pedro.
¿Por qué, Miguel? ¿Por qué?
Los buenos recuerdos para mí, de finales de los noventa, también fueran trastocados por este inescrupuloso edil.
Estuve matriculado en la Prepa Tec Garza Sada, la de Morones Prieto. Y era obligatorio para mis compas y yo, dirigirnos en las horas libres a desayunar al Centrito. Regularmente campechanas “de arete” en Tacos del Julio (porque abrían desde la mañana).
Ya estando en Campus Monterrey, no perdonábamos las idas al Noctiz o al Alebrije, sin antes empacarnos unas buenas hamburguesas del Frank & Stein’s para aguantar la juerga.
Beto Frías siempre cuido de su clientela proveyendo comida de excelente calidad, inmejorable atención y esa agradable sensación de sentirte siempre en casa, durante cada visita.
¡Los vamos a extrañar amigo!
Miguel Treviño convirtió el Centrito en una zona de guerra. Hizo lo que las teorías conspirativas han traído a la luz con los incendios en Maui, Hawái.
Se especula que los incendios fueron provocados con la intención de que los grandes y poderosos terratenientes, en su mayoría foráneos, compraran a precio de remate los terrenos devastados por el fuego de los isleños originarios.
Aquí, el “efecto Hawái” se convirtió en una realidad porque Miguel Treviño dejó morir a los empresarios. Sí creo que lo hiciera con la intención de asfixiarlos y que nuevos propietarios llegaran a aprovecharse de lo creado por los comerciantes oriundos.
No puedes ser tan estúpido para no cumplir con un cronograma y plan de obra, ¡en San Pedro Garza García!
Definitivamente hubo dolo y mala intención. La mafia de Miguel Treviño les rompió las piernas y los brazos a los buenos del Centrito.
30 años del Frank & Stein’s quedaron sepultados debajo de los escombros de un trabajo público malicioso.
En el video, Beto dijo: “Esta obra va a quedar en la historia, en los anales de la historia va a quedar, como el genocidio comercial más grande que tuvo el Centrito Valle… Miguel te lo repito como lo dije en un video, ¡Mentiroso, nos engañaste! Dios te bendiga, pero toda la vida tendrás en tu mente el que acabaste con mi negocio y con muchos de aquí”.
Confío en que la solidaridad de los neoloneses alcanzará a las cúpulas políticas y empresariales de San Pedro y nadie rescatará a Miguel Treviño.