Mi experiencia con el abdomen agudo

Dr. Morales DETONA: La dificultad en el diagnóstico clínico, se basa fundamentalmente en la falta de consideración de todas las piezas de un rompecabezas.

Difícil de armar, para alguien que no posee todo el conocimiento, las destrezas, las actitudes y aptitudes necesarias para construir un todo en beneficio de la salud de una persona (igual, pasa en la política, la ingeniería, el derecho, la arquitectura, el arte, vamos, hasta en el crimen organizado, en el que se requiere de alguien muy malandro, que igual puede de disfrazarse de muy bueno o de muy malo, ir a misa, comulgar, impulsar las ciencias y las artes y al mismo tiempo, ordenar el asesinato o la violación, de una persona de cualquier edad o sexo, o robarse una presidencia de la República o participar por comisión u omisión en la misma). 

Haiga sido como haiga sido, se requiere, en la actividad clínicatécnicomédica, de la consideración de un minimo de variables y del conocimiento integral de una persona (conocer integralmente al paciente, cosa muy difícil, no es fácil ser paciente, los doctores somos los peores pacientes).

Para hacer el diagnóstico clínico preciso (se requiere ser muy preciso), de una enfermedad de cualquier índole y /u origen que atenta contra la salud y la vida de dicha persona; mencionado sea de paso podemos enfermar de cualquier órgano o aparato del cuerpo, de forma aguda, subaguda y/o crónica, y podemos requerir del abordaje de uno o varios médicos y de la participación de un sinúmero de personas del área de la Salud y recursos humanos paramédicos, administrativos y tecnológicos, para evitar que alguien se muera, porque el abdomen agudo mata, inevitable e irremediablemente mata, sí no es tratado oportuna y apropiadamente mata, y deja heridas (emocionales) entre los cercanos del fallecido, que no cierran a lo largo de toda la vida.

Recuerdo algunos casos, el más truculento, una pobre mujer de 52 años que después de evolucionar durante 22 días fue vista y evaluada en un servicio de urgencias con una distensión  abdominal y un estado séptico tan grave y avanzado, que no  permitió ni la evaluación preanestésica, solo una punción diagnóstica realizada en la pared abdominal de la paciente, pudo dar pie, a la salida de material purulento de un olor tan pútrido que casi todos los presentes, personas muy avezadas y expertas en el manejo de situaciones clínicas graves y complejas, se vieron en la necesidad de vomitar y no nadamás ahí, sino varios días después y el olor tardó más de una semana de desaparecer del sitio. 

Causas de abdomen agudo puede haber muchas, resalta en importancia la apendicitis aguda qué puede ser muy fácil de diagnosticar para el experto a pesar de las múltiples formas clinicas en que la apendicitis aguda suele presentarse (ésta sí, no es área para legos [entiéndase falta de instrucción, ciencia o conocimientos]). 

Un camarada, muy admirado y apreciado me platicó del caso de su mamá quien tuvo una apendicitis aguda retrocecal alta, una de las tantas formas (más de cinco diría Peña), en que se presenta la apendicitis aguda, el papá  de mi camarada médico también opinó qué era un dolor "pasajero", transitorio, que no ameritaba más cuidados, el abuelo de mi camarada,  médico también, opinó  que era una apendicitis retrocal alta y solicitó la participación de un cirujano quien ante el problema clínico operó a la mamá de mi amigo y se resolvió adecuadamente el problema. 

Recuerdo otros qué no han sido tan afortunados, no tan aparatosos como el señalado al principio, sin embargo igual de trágicos y que terminaron con la vida de los pacientes. 

Ocurren o más bien, nos enteramos de dos o tres casos al año, en los que los pacientes pierden la vida por un retardo en el diagnóstico, debido a que no se piensa o no se considera la posibilidad diagnóstica de apendicitis aguda u otra causa de abdomen agudo, la hija de un amigo muy cercano empezó con dolor abdominal, me enteró vía telefónica, recomendé hospitalización, la hospitalizaron más de 10 días después y la operaron sin embargo no sobrevivió a la peritonitis y al choque séptico, fue una real tragedia, mi amigo no se recuperó del dolor y poco después el COVID-19 se lo llevó, la esposa de un amigo recientemente falleció por un abdomen agudo. 

Estamos conviviendo con el hijo de una amiga muy querida, hace poco más de 10 años el se vió en un problema semejante, a gritos y sombrerazos se sometió a la cirugía y seguimos disfrutando de  su agradable compañía, Dios quiera que por muchos años más.
Dr. Morales

Médico Internista desde 1979 hasta la actualidad, jubilado, dedicado a la investigación clínica, aficionado pasionalmente a la Salud y sucedáneos, el Rock and roll y el Foot Ball americano.